Los sindicatos en Argentina advierten de una serie de paralizaciones en medio de la crisis económica que se agudiza por el plan de ajuste fiscal implementado por el gobierno de Javier Milei.
Los ferroviarios son los primeros en establecer una huelga contra el plan del libertario. Los sectores del transporte, la salud, la educación y los empleados fiscales también anuncian movilizaciones. Mientras tanto los trabajadores no tuvieron una respuesta desde la Casa Rosada ante las alzas en los precios de los alimentos y los servicios.
La crisis económica es cada vez más amplia y el último informe de un centro de estudios dio cuenta que cerca del 60% de las personas en Argentina vive bajo la línea de la pobreza, cifra que supera las mediciones de meses anteriores, mientras los expertos advierten de una inminente crisis del hambre. Los sindicatos esperaban las negociaciones del salario mínimo.
El ejecutivo otorgó un aumento del 30%, pero sindicalistas afirman que “esa alza es casi inexistente frente al 254,2% del alza de los precios acumulada durante un año hasta enero”, por eso la reacción de los mismo sindicatos no se hizo esperar y los trabajadores de “La Fraternidad” paralizaron los trenes por 24 horas. La agrupación más grande de trabajadores ferroviarios, que incluye casi a la totalidad de los conductores, acusó que el gobierno solamente les ofreció otro 12% de mejora salarial y recolocarlos como empleados estatales.
Para hoy se anunciaron protestas de organizaciones sociales en las calles y rutas, para el lunes se espera una huelga del sector público con los docentes de la educación. En paralelo la mayor central sindical, la CGT, analiza una huelga general en las semanas venideras.
El gobierno de Milei responde acusando a los dirigentes sindicales por las medidas de fuerza que enfrentarán.