La terapia grupal como herramienta de rehabilitación

El MSP tiene el programa “Prestaciones en Salud Mental” que incluye terapias de grupos para tratar adicciones.

La terapia en grupo es un tipo de tratamiento en el que un terapeuta dirige una sesión con un pequeño grupo de personas, que comparten adicciones similares. En ella, cada miembro comparte con los demás sus preocupaciones, incentivando así la empatía entre todos y la comprensión.

Sentir que tus emociones y sentimientos son más comunes de lo que piensas ayuda a la aceptación de la adicción y a una futura recuperación. Este tipo de psicoterapia se focaliza en las interacciones y vínculos que se generan dentro del grupo, dotando así a sus miembros de estrategias adecuadas para afrontar el problema y de recursos cognitivos y emocionales para un futuro cambio y rehabilitación.

Esta psicoterapia es muy utilizada, sobre todo para casos de adicciones, fobias y trastornos de conducta alimentaria. Su objetivo general, como cualquier otra terapia, es fomentar entre los asistentes el cambio de conducta y hábitos. Más allá de ese objetivo, la terapia en grupo busca acabar con el aislamiento al que los pacientes recurren cuando padecen la patología.

La terapia grupal se desarrolla en grupos reducidos (entre 7 y 12 personas) y es impartida por un especialista que toma el rol de moderador. Todos los miembros del grupo se sientan en círculo, para que la terapia sea más fluida y todos los participantes puedan verse las caras.

Como toda terapia, la terapia de grupos presenta distintas fases, pasando por el estado inicial o de orientación. Allí el objetivo central es generar confianza a los asistentes del grupo hacia el terapeuta y el resto de participantes. En esta fase surgirá entre los participantes ansiedad e inseguridad, ya que cada uno está en su máxima exposición y tiene miedo de no ser aceptado por los demás.

Seguidamente llega el estado de transición; tras pasar el estado inicial, los participantes suelen sentir dudas sobre los beneficios de la terapia, y es usual que se genere el miedo a exponerse. También es normal que se ponga incluso en duda la autoridad del terapeuta.

A medida que cada miembro vaya compartiendo su problemática con los demás y con el terapeuta, se irá reduciendo la ansiedad, posibilitando así el inicio y la confianza para los siguientes estadios. Luego se llega a la fase de trabajo, donde se espera que los asistentes reconozcan que son responsables de sus vidas y aprendan a ser parte del grupo manteniendo su individualidad. Se empezará a generar la confianza y la aceptación.

El último es el estado final o de consolidación; en este paso se lleva a cabo una recapitulación de toda la terapia, para mostrar los avances conseguidos. Los miembros pueden sentir cierta tristeza y temor a afrontar su conflicto fuera del grupo, pero tendrán las herramientas necesarias para conseguirlo.

En Uruguay, en el Ministerio de Salud Pública (MSP) existe el decreto “Prestaciones en Salud Mental”, que establece la obligatoriedad de brindar atención psicológica en todos los prestadores del Sistema Nacional Integrado de Salud. Se definen tres modalidades de atención para niños, adolescentes, jóvenes y adultos, según sus necesidades.

El programa presta servicio de terapias a personas que requieran rehabilitación. Son tres modos de atención grupal o individual para diferentes edades, donde abarcan a usuarios con diferentes adicciones, como problemas de salud mental.

Deja una respuesta

Your email address will not be published.

Latest from Salud

Los quirófanos híbridos

Un espacio quirúrgico para procedimientos que requieren tanto cirugía abierta como intervenciones mínimamente invasivas.