El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha apelado a un «reformateo profundo» para que haya «más revolución y más patria» en respuesta a las maniobras de la oposición.
«Los tenemos derrotados pero para consolidar esa derrota tenemos que hacer más revolución», ha afirmado en referencia a la «corriente fascista» durante un encuentro generacional celebrado en el Palacio de Miraflores de Caracas y retransmitido por la televisión pública venezolana. El objetivo es «ser más independientes y soberanos para construir una democracia más profunda y popular, para avanzar a nuestro Socialismo del siglo XXI». Esta postura incluye «estar en ofensiva, rectificar, refundar» para crear nuevos métodos de trabajo «a favor de todos los venezolanos y venezolanas».
Maduro ha cargado también contra los dirigentes que se declaraban revolucionarios y traicionaron al expresidente Hugo Chávez, pero que «se secaron». «El comandante Chávez salió a construir de barrio en barrio y de calle en calle» con un liderazgo «fuerte, clave, una jefatura que rompía con todos los esquemas, como ustedes saben, del caudillismo», ha resaltado. «Muy lejos Hugo Chávez del caudillismo que conoció en el siglo XIX, en el siglo XX y que todavía conoce buena parte de esa derecha», ha argumentado.
Maduro ha destacado así la lejanía de Chávez de los «egos». «¿Cuántos egos rodearon y traicionaron a Chávez? ¿Y dónde están los egos alimentados por la burguesía en sus medios de comunicación que traicionaron a Chávez? Se secaron, secos, derrotados, abandonados y solos como la canción», remachó.
