Condenan a tres militares por violaciones a los derechos humanos durante la dictadura

La Justicia condenó a los militares Héctor Rombys, Juan Alvez y Mohacir Leite por violaciones a los derechos humanos cometidas contra 39 jóvenes, en su mayoría menores de edad, integrantes de la Unión de Juventudes Comunistas (UJC). Los hechos ocurrieron en Treinta y Tres durante la dictadura civil-militar. La sentencia llega tras la denuncia presentada por 20 de las víctimas.

La causa, que permanece abierta, involucra a 11 militares denunciados. Para las víctimas en este caso la Justicia tardó 49 años en llegar. El proceso judicial se reactivó en 2011 con la creación de la Fiscalía Especializada, después de décadas de trabas legales impuestas por los acusados para evitar la condena. “Hace un ratito me enteré, que fueron condenados los primeros 3 torturadores denunciados de nuestro caso”, publicó Liliana Pertuy Franco en su cuenta de Facebook.

“Hace 49 años eramos presos por la dictadura 39 adolescentes entre 13 y 18 años, en la ciudad de 33. La mayoría, menores de edad. Lo vivido es muy feo y fuerte de describir”, agregó.  En su publicación Pertuy describió el camino recorrido hasta esta sentencia. “Durante décadas solas golpeamos puertas hasta que en el 2011 unos 20 hicimos la denuncia en 33”, la militante comentó a su vez: “el Frente Amplio patrocinó nuestra denuncia”.

Finalmente  Pertuy lamentó que “algunos ya murieron, hoy tenemos todos y todas más de 60 y pico. La justicia demoró” al tiempo que aclaró de todos modos sentir “alivio” más allá de que  “nadie nos devolverá lo sufrido, lo arrebatado, lo que sufrieron nuestras familias, pero la justicia alivia”.

Los hechos

En abril de 1975, el Ejército llevó a cabo un extenso operativo en Treinta y Tres con el objetivo de desmantelar al Partido Comunista en el departamento. Entre el 12 y el 15 de ese mes, detuvieron a 39 militantes de la Unión de Juventudes Comunistas (UJC), quienes fueron sometidos a torturas y abusos sexuales en el cuartel del pueblo.

Los menores tenían 13 años, mientras que los mayores apenas habían alcanzado los 18. A la mayoría los arrestaron en sus casas o en el camino hacia el liceo. Mabel Fleitas, de 17 años, fue detenida junto a su madre y sus tres hermanas: Carmen, de 18; Alicia, de 16; y Marisa, la más joven, quien acababa de cumplir 13 años. Según los testimonios, los mantuvieron encapuchados y de plantón durante horas, con las manos atadas con alambre. Les negaron agua y comida, les aplicaron descargas eléctricas, los sometieron al submarino, los quemaron con cigarrillos, los colgaron, los golpearon y muchos otros tormentos.

Para justificar la detención de tantos menores de edad la dictadura montó una operación de propaganda según la cual la Ujc realizaba campamentos de “adoctrinamiento político” y “promiscuidad sexual” y que debido a a esto último se propagaban las enfermedades veneras, según el régimen sólo en las adolescentes. A raíz de esto las adolescentes fueron víctimas de un tratamiento severo contra una sífilis inexistente.

La sentencia

La Justicia condenó a Héctor Sergio Rombys Kulikov, Juan Luis Álvez García y Mohacir Leite Urioste por múltiples delitos de privación de libertad, abuso de autoridad y lesiones graves. Rombys y Álvez recibieron penas de 12 y 11 años de prisión, respectivamente, mientras que Leite fue condenado a 8 años. Los tres deberán indemnizar al Estado por los gastos de alimentación, vestido y alojamiento durante el proceso y la condena.