A pocos días de la Cumbre del G20 en Río de Janeiro, que se llevará a cabo del 18 al 19 de noviembre, el gobierno francés ha confirmado que no firmará el acuerdo de libre comercio entre la Unión Europea (UE) y el Mercosur. La ministra de Agricultura de Francia, Annie Genevard, fue tajante al afirmar: “No se firmará”.
Genevard explicó en una entrevista con la cadena de televisión France 3 que la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, está al tanto de la postura de Francia respecto al bloque sudamericano. Según la ministra, el acuerdo es «un mal acuerdo» para Francia, ya que prevé la importación de grandes cantidades de productos, como 99.000 toneladas de carne de res, 180.000 toneladas de azúcar y carne de ave, que pondrían en competencia a los productores locales, afectando negativamente a la industria agrícola francesa.
Por su parte, el ministro francés de Asuntos Europeos, Benjamin Haddad, subrayó que “Francia no está en contra del libre comercio, pero este acuerdo no es aceptable en su estado actual”. En su intervención, Haddad también destacó las preocupaciones del gobierno francés sobre las diferencias en las normativas medioambientales entre los países del Mercosur y la Unión Europea. En particular, señaló el uso de productos fitosanitarios en el Mercosur que están prohibidos en Europa, lo cual agrava la oposición del país a este tratado.
El rechazo de Francia podría generar un nuevo obstáculo en el proceso de ratificación del acuerdo entre la UE y el Mercosur, que ya ha enfrentado críticas y demoras durante años. El acuerdo, que abarca a los países del Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay), fue firmado en 2019, pero aún debe ser ratificado por los parlamentos de los países miembros de la UE y los del bloque sudamericano.
Este desarrollo podría tener repercusiones importantes en la política comercial internacional, justo antes de la reunión del G20, donde se debatirán temas clave relacionados con el comercio global y el cambio climático.
Hace tiempo Francia y los paises del Este se oponian por intereses de competencia con los agricultores Pero siguieron insistiendo para nada