“Me estoy muriendo. Y el guerrero tiene derecho a su descanso”, afirmó este jueves el expresidente José Mujica al semanario Búsqueda. El cáncer de esófago que afectó inicialmente a Mujica ahora se expandió al hígado, según informó el histórico dirigente. Lo anunció en el living de su casa, cerca de su esposa, Lucía Topolansky, y entre lágrimas, según consigna la crónica. “El cáncer en el esófago me está colonizando el hígado. No lo paro con nada. ¿Por qué? Porque soy un anciano y porque tengo dos enfermedades crónicas. No me cabe ni un tratamiento bioquímico ni la cirugía porque mi cuerpo no lo aguanta”, describió Mujica.
Tras el anuncio, su médica personal Raquel Pannone brindó una conferencia de prensa para dar detalles sobre el estado de salud del también exsenador y exministro.
Pannone aclaró que las “posibilidades de tratamiento para el exmandatario estaban muy limitadas desde el inicio del diagnóstico”.
“Solamente podíamos hacer radioterapia. Eso fue lo que hicimos. Si bien hay alguna posibilidad escasa de tratamiento, con un criterio más que nada paliativo para enlentecer, todos los tratamientos tienen varios efectos secundarios y soportar los efectos secundarios a veces se hace muy trabajoso”, explicó.
Según explicó Pannone, actualmente el expresidente no “tiene demasiados síntomas” y no está teniendo en “este momento cambios en su vida cotidiana o dolor”.
“Sigue con los dolores de siempre, que no eran pocos, por los 90 años que tiene”, indicó Pannone.
Sobre la evolución de la enfermedad, la médica dijo que “es habitual que los tumores del aparato digestivo tengan una ubicación secundaria a nivel del hígado, que fue lo que sucedió”.
“Los estudios imagenológicos hechos en los últimos días así lo mostraron. Eso fue lo que cambió, pero es la evolución habitual que tienen este tipo de pacientes. Lo que Pepe transmitió es sobre la existencia de metástasis de su cáncer de esófago a nivel del hígado. La situación clínica de él hoy es la misma que los días anteriores. Está en su chacra, está tranquilo y se está alimentando por vía oral para complementar el aporte calórico y de nutrientes. La situación se va a mantener, pero no puedo decir por cuánto tiempo se va a prolongar”, explicó Pannone.
Panonne contó que el expresidente “quiere estar tranquilo” y hacer con su tiempo “lo que tenga ganas de hacer”.
“Esto es: subirse al tractor, estar en la chacra, charlar con quien él tenga ganas de hacerlo y no sentir la presión constante”, sostuvo y pidió respetar la decisión de Mujica.
“Hay que respetar a la persona, y salir un poco del Pepe Mujica político, centro de la política y dirigente de todos nosotros, y debemos centrarnos en que es un señor de 90 años que está enfermo y que tiene derecho a usar su tiempo como él lo crea conveniente”, dijo la experta.
En cuanto a las alternativas de tratamientos, Panonne dijo que desde el inicio del diagnóstico las posibilidades de tratamiento estaban “muy limitadas” y que únicamente se podía hacer radioterapia. “Eso fue lo que hicimos; y si bien hay alguna posibilidad escasa de tratamiento con un criterio más paliativo,
La médica contó que en este momento Mujica está recibiendo el tratamiento que requiere para los síntomas que presenta, que según dijo, “no son demasiados”.
Cairo, Agazzi
Por su parte, la legisladora Cecilia Cairo y el ex senador Ernesto Agazzi estuvieron presentes en la conferencia y reforzaron el pedido de Mujica de darle tranquilidad. “Vamos a tratar de acompañar como él lo solicitó, dejándolo disfrutar de las cosas de la vida que a él le gustan y acompañando mucho a Lucía, que también es una compañera a la que queremos y que precisamos”, dijo Cairo.
En cuanto a la noticia, la legisladora dijo que la transitan con dolor. “Más allá que todos sabemos que biológicamente algún día llegará, siempre esperamos que eso no pase”, afirmó Cairo.
En tanto, Agazzi mostró también su preocupación y dolor por la salud actual de Mujica. “Pepe nos regaló su vida, con sus ideas, con su dinámica, con lo que él sentía. Nos dio todo lo que tenía. Y ahora nos está pidiendo algo: que lo dejemos tranquilo. Él quiere terminar bien. Que no lo presionemos mucho. Es un pedido modesto que nos hace para todo lo que nos dio. Así que, estamos presentes en esto. Lo vamos a seguir”, expresó Agazzi. Dijo que todos sus compañeros lo acompañarán y respetarán sus deseos.
“Estoy condenado, hermano”
Mujica anunció en abril de 2024 que tenía cáncer de esófago. La noticia recorrió el mundo y políticos internacionales de primer nivel lo llamaron a su chacra en Rincón del Cerro para enviarle fuerza. Mujica se recuperó. Se sometió a 32 largas sesiones de radioterapia y el tumor que lo afectaba, en principio, desapareció. Pero las nuevas noticias sobre su salud no son alentadoras.
Mujica contó que no se someterá a ningún otro tratamiento para tratar la enfermedad ya que le pidió a los médicos que no lo hagan “sufrir al pedo”. “Que me pichicateen y cuando me toque morir, me muero. Así de simple como te lo digo. Estoy condenado, hermano. Hasta acá llegué”, le dijo al semanario.
“No soy un viejo consultor”
El ex mandatario uruguayo –que sigue siendo uno de los políticos más populares del país, junto al presidente Luis Lacalle Pou– es ahora un “viejo en el final”, que lo único que quiere es dedicarse a trabajar en su chacra mientras el cuerpo se lo permita.
También se despidió de sus compañeros y los simpatizantes de su espacio político y aseguró que hace tiempo que las principales decisiones políticas no pasan por su “rancho”. “Ahora, tengo mis simpatías y cuando puedo dar una manito, la doy. Pero no soy un viejo consultor, que me tienen que pedir permiso”, sostuvo.
Mujica aseguró también que no dará más entrevistas y tampoco tendrá más apariciones públicas. “Lo que pido es que me dejen tranquilo. Que no me pidan más entrevistas ni nada más. Ya terminó mi ciclo. Sinceramente, me estoy muriendo. Y el guerrero tiene derecho a su descanso”, señaló.
El respaldo a Orsi
El ex presidente ya no quiere hablar de la actualidad política, aunque todavía sea un referente en la opinión pública: sus comentarios han tenido incidencia hasta el final. De hecho, Mujica fue el principal apoyo político de Yamandú Orsi, quien el próximo 1° de marzo asumirá la Presidencia en Uruguay.
Pero ahora lo que busca es ponerle un punto final a su vida. Una vida que, según él, le ha dado “muchos premios”: “El principal es que estoy a cuatro meses de cumplir 90 años. Mirá la vida que he tenido. Es un desastre”, comentó.
En las últimas elecciones, el Movimiento de Participación Popular (MPP), el espacio de Mujica, tuvo una votación histórica y tendrá una bancada importante en el próximo período de gobierno. Él se siente “orgulloso” de esto, algo que le permite irse “tranquilo y agradecido”.
Al lado de su perra Manuela
Enfermo de cáncer, Mujica recorre todos los días un poco la chacra en su tractor y acomoda las cosas para las generaciones que vayan a quedar. Ese predio está a nombre de su esposa y lo heredará su sector político. Para los que vengan, compró un tractor de USD 28 mil, así tienen “fierros nuevos”.
Mujica sabe que se morirá en su chacra. Y quiere que lo entierren allí, al lado de donde está su perra Manuela.
EN PAZ, Y COMO TU QUIERAS ASI DEBE SER!!! Y SIN SUFRIMIENTO QUERIDO VIEJO!!!