Un estudiante y exjugador de fútbol americano universitario fue detenido acusado de matar a tiros a tres antiguos compañeros de equipo en la Universidad de Virginia, mientras la policía busca a los responsables de otra masacre, en este caso de cuatro alumnos de la Universidad de Idaho, cuyos cuerpos fueron encontrados en una casa cerca del campus.
En el caso de la Universidad de Virginia de acuerdo con Policía de la Universidad, el principal sospechoso responde al nombre de Christopher Darnell Jones, un joven de 22 años, estudiante del centro y quien, tras varias horas de búsqueda, ha caído finalmente en manos de las autoridades.
Una fuente policial consultada por la cadena CNN ha detallado que Jones ha sido detenido sin incidentes mientras conducía su vehículo en el condado de Henrico, a unos 120 kilómetros del escenario del suceso.
De acuerdo con el jefe de Policía de Universidad de Virginia, Tim Longo, Jones podría enfrentarse a tres cargos por asesinato en segundo grado, y otros tres por uso de arma de fuego en la comisión de un delito grave. Longo ha añadido Jones ya había sido investigado por empleados del campus universitario después de que el pasado mes de septiembre hiciera comentarios sobre que poseía un arma de fuego. Aquella denuncia fue presentada por una persona ajena a la Universidad y que no vio en primera persona la supuesta arma.
Asimismo, la Oficina de Asuntos Estudiantiles analizó el caso y determinó que aquellas declaraciones de Jones no se hicieron con un tono amenazante.
Además el compañero de habitación del principal sospechoso de este tiroteo no denunció en ningún momento haber visto ningún arma.
El rector de la Universidad, Jim Ryan, ha señalado que Jones abrió fuego contra en el aparcamiento del campus universitario contra un autobús que traía a los estudiantes de vuelta tras una excursión de carácter cultural.
En Idaho
La Policía de la ciudad de Moscú, en el estado estadounidense de Idaho, ha localizado el cuerpo sin vida de cuatro estudiantes en una residencia cercana a la Universidad, sin que por el momento hayan trascendido más detalles. Las autoridades de seguridad han apuntado a la posibilidad de un caso de homicidio, por lo que la dirección de la Universidad ha enviado una alerta para que los estudiantes se refugiaran en un lugar seguro o alejados del campus universitario.
El capitán de Policía Tyson Berrett ha incidido en que todavía hay una «investigación en curso», por lo que no ha informado sobre las causas de la muerte, ni tampoco ha confirmado edad ni sexo de las víctimas, según recoge NBC News. En un primer lugar, la Policía se había desplazado hasta la residencia de estudiantes para atender a una llamada que alertaba de una persona inconsciente. Cuando los agentes llegaron a lugar «descubrieron a cuatro personas que habían fallecido», según recoge el ente en un comunicado.
«El Departamento de Policía de Moscú expresa nuestras más sinceras condolencias a los familiares, amigos y la comunidad de Moscú», ha remarcado el capitán Berrett. La Universidad ha cancelado todas sus clases previstas para este lunes.
