“Está absolutamente claro que el rechazo del petróleo ruso tendría consecuencias catastróficas para el mercado global”, dijo el viceprimer ministro ruso, Alexander Novak, en un comunicado en la televisión estatal. Agregó que “el aumento de los precios sería impredecible. Serían 300 dólares por barril, si no más”.
Novak dijo que a Europa le tomaría más de un año reemplazar el volumen de petróleo que recibe de Rusia y que tendría que pagar precios significativamente más altos.
“Los políticos europeos deben advertir honestamente a sus ciudadanos y consumidores qué esperar. Si quieres rechazar los suministros de energía de Rusia, adelante. Estamos listos para ello. Sabemos adónde podríamos redirigir los volúmenes”.
Novak sostuvo que Rusia, que suministra el 40% del gas de Europa, “estaba cumpliendo con sus obligaciones en su totalidad”, pero que estaría en todo su derecho de tomar represalias contra la Unión Europea después de que Alemania congeló el mes pasado la certificación del gasoducto Nord Stream 2.
“En relación con… la imposición de una prohibición sobre Nord Stream 2, tenemos todo el derecho de tomar una decisión equivalente e imponer un embargo sobre el bombeo de gas a través del gasoducto Nord Stream 1. Hasta ahora no estamos tomando tal decisión, pero los políticos europeos con sus declaraciones y acusaciones contra Rusia nos empujan hacia eso».”, dijo el viceprimer ministro ruso.Rusia tiene un control estricto sobre el mercado de gas de Europa, con las principales naciones, incluida Alemania, comprando hasta el 30% de su suministro a Putin. Sin embargo, se dice que Alemania está cerca de dejar de comprar.