El asesinato de Andrés Pollero, fue el 31 de mayo del 2020. Lo mataron a tiros en el marco de una rapiña. Los delincuentes forcejearon con la víctima en la puerta de su casa, sobre la calle Pedro Boggiani, esquina Ignacio Rivas, en Sayago.
Pollero manejaba un auto marca Kia, modelo Pride Pop. Los delincuentes lo abordaron por la puerta del conductor y le exigieron el vehículo. El hombre, quien se supone se resistió, forcejeó con los ladrones, hasta que estos últimos le dispararon. La bala le atravesó el pecho.
Pocos minutos después de las 18:00 horas de aquella tarde fría de domingo, el árbitro de fútbol y docente murió. Los ladrones se llevaron el auto, que pocos días después apareció incendiado en el barrio 40 semanas.
En su momento, investigadores de Zona Operacional III trabajaron en el caso, pero por falta de pruebas para Fiscalía, no se había logrado capturar a los autores del crimen.
Así mismo, pudieron capturar a un hombre por receptación, ya que había comprado el celular robado del árbitro.
A casi dos años del crimen, la división de Homicidios Complejos logró identificar a un hombre de 47 años y a una mujer de 30, como principales sospechosos del asesinato.
Ambas personas, que cuentan con un largo prontuario criminal, se encuentran en prisión por otros delitos cometidos en los últimos meses.
Este lunes, ambos, fueron llevados desde la cárcel hasta la Fiscalía de Homicidios, a cargo de la fiscal Mirta Morales, quien intentó interrogarlos por el asesinato, aunque ninguno de los dos quiso declarar.
Finalmente, la fiscal Morales decidió que el próximo jueves a la tarde imputará a los delincuentes por el delito de homicidio.
El abogado de la familia de Andrés Pollero, Pablo Lamela, confirmó a Subrayado que serán imputadas dos personas que participaron directamente en el homicidio de Andrés. “Dentro del sentimiento de dolor y angustia para la familia, es un día muy importante y muy satisfactorio para ellos”, dijo el abogado.
Lamela definió la investigación como “muy compleja”, debido a las evidencias, “todo lo que tiene que ver con pruebas técnicas, ADN, filmaciones, es un proceso que lleva mucho tiempo. Además de lo que es el paradero de las personas, y la identificación fehaciente de los autores”, indicó.
Además afirmó que la Fiscalía actuó con cautela, “pasos seguros y certeros”.