El Papa ha recibido este lunes 13 de febrero en el Vaticano a una delegación de la Universidad Sulkhan-Saba Orbeliani de Tiflis (Georgia) a los que ha advertido: «La caída del pueblo comienza donde termina la memoria de su pasado».
Así, ha advertido de que, a menudo, son el «olvido y la indiferencia» los que hacen que todo parezca oscuro e indiferente, mientras que la cultura y la educación restauran la memoria del pasado y arrojan luz sobre el presente.
El Pontífice ha puesto esta universidad georgiana como «bello ejemplo de la fructífera colaboración entre católicos y ortodoxos en los ámbitos cultural y educativo».
Así, ha defendido que la universidad debe tener como objetivo «situar en el centro la dignidad de la persona humana».
«Es necesaria esta benéfica iluminación del conocimiento, mientras en el mundo se hace más espesa la oscuridad del odio, que a menudo proviene del olvido y de la indiferencia», ha dicho el Papa.
Y es más fácil creer que pensar, por eso hay más creyentes que pensadores. (Albert Einstein)