La Cooperativa Calcar anunció el cierre definitivo de su planta industrial en Tarariras, dejando tras de sí un rastro de incertidumbre y preocupación. La decisión, que afecta a 107 trabajadores y a numerosos productores lecheros, pone fin a años de lucha por mantener a flote una compañía emblemática. «Los sindicatos industriales veníamos advirtiendo al gobierno anterior y a este también» sobre el desenlace dijo Danilo Dárdanos Presidente de la Confederación de Sindicatos Industriales. En declaraciones a Subrayado (canal 10) adelantó que habrá una reunión con la ministra de Industria, Fernanda Cardona. El sindicato ha criticado duramente la decisión de la empresa, calificándola de «unilateral» y denunciando la falta de respuestas y soluciones para los trabajadores y productores afectados.
Por su parte la Federación de Trabajadores de la Industria Láctea (FTIL) anmunció ayer un paro nacional parcial para hoy de dos horas por turno. En un comunicado señalan que “en el marco de la gravedad de la decisión unilateral de la empresa Calcar, decidida a través de sus directores que se retiraron y dejaron a los trabajadores y a pequeños productores sin respuestas y soluciones, la FTIL, resuelve no recibir leche de Calcar en ninguna de las industrias, dejando en claro que las y los trabajadores de Asociación Laboral de Trabajadores de Calcar (Altrac) están a orden en la planta para recibir y procesarla”.
Los problemas económicos de Calcar no son nuevos. La cooperativa arrastraba dificultades financieras desde hace tiempo, lo que se manifestó en el cierre de su planta en Carmelo en 2023 y en los constantes retrasos en el pago de salarios. La falta de remitentes y las dificultades para la reconversión, a pesar de los fondos recibidos del Fondo de Reconversión de la Industria Láctea, terminaron por sellar su destino.
El secretario ejecutivo de la Cámara de la Industria Láctea del Uruguay, Ariel Londinsky dijo a Telemundo (canal 12) que Calcar «arrastra una situación financiera desde hace años. Había una disminución bien importante de la producción y se habían hecho muchos esfuerzos para rescatarla por parte de todos». Además de deber a los banco, también se le debía a los productores remitentes y estos «ya no podían aguantar más los retrasos de pagos y gran parte de ellos se decidieron a enviar a otras plantas que les aseguraban el pago al día».
El cierre de Calcar no solo deja sin empleo a más de un centenar de personas, sino que también impacta negativamente en la economía local y en la industria láctea en general. Los pequeños productores, que dependían de la cooperativa para vender su leche, se enfrentan ahora a un futuro incierto.
Los Fondos de Reconversión Para la Industria Láctea se reciben: COLEME; CALCAR, Granja Pocha. La plata llega pero no se traduce en el mantenimiento de las fuentes de trabajo. En qué se fue esa guita? La guerra entre Rusia y Ucrania trajo aparejado el mandato de EEUU de que no le vendieran nada a Rusia, como sanción económica. Lacalle Pou, faltaba más, retrasmitió la orden y Calcar dejó de venderle a los rusos, pero justamente ni el gobierno de EEUU ni el de Lacalle Pou le consiguieron nuevos clientes a Calcar. resultados a la vista.
Y hay paises que estan desesperados por conseguir leche como el caso de Cuba
Y hay paises que estan desesperados por conseguir huevos como el caso de USA
Y hay paises que estan desesperados por sacar gente de abajo de los puentes como el caso de USA
Y hay paises que estan desesperados por los más de 50 millones de pobres como el caso de USA
Y hay paises que estan desesperados por los miles y miles que hay en al calle por el fentanilo como el caso de USA
Aquí no se trata de EE UU, ni de Rusia ni de Cuba. Se trata de una realidad comercial. Las empresas deben también ser racionalizadas de acuerdo a necesidades y posibilidades. En un país con tres millones de habitantes existen 27 industrias lácteas. Los resultados están a la vista.