El gobierno de la República Popular China presentó oficialmente el Tercer Documento sobre la Política de China hacia América Latina y el Caribe (ALC), un plan que actualiza la visión estratégica de Beijing hacia la región. El texto sintetiza la experiencia acumulada en los últimos años, marcados por un mayor intercambio comercial, nuevas plataformas de cooperación y un rol creciente de China en el Sur Global, y proyecta los lineamientos para una etapa que, según afirmó la Cancillería, buscará llevar los vínculos “a una nueva altura”.
El acto de lanzamiento estuvo encabezado por el ministro asistente de Relaciones Exteriores, Cai Wei; el embajador de la Mancomunidad de Dominica y jefe del Cuerpo Diplomático de ALC en China, Charles Martín; y el coordinador de Asuntos de CELAC de Colombia, Francisco Gutiérrez. Las autoridades presentaron el documento ante los 27 embajadores latinoamericanos acreditados en Beijing, entre ellos el representante de Uruguay, Aníbal Cabral, y un grupo de periodistas de distintos medios de la región, incluido Diario La R. La ceremonia se desarrolló en la sede del Ministerio de Relaciones Exteriores de China.
Wei explicó que el documento, de más de 30 páginas, se basa en los cinco programas anunciados por el presidente Xi Jinping en mayo durante la Cuarta Reunión Ministerial del Foro China–CELAC. “Las políticas están centradas en promover la construcción conjunta de una comunidad de futuro compartido entre ambas partes”, dijo el funcionario, quien destacó que la actualización del documento después de 9 años era necesaria debido al “rápido desarrollo” que ha tenido la relación en la última década.

También recordó que China “se ha convertido en el segundo socio comercial de la región y el primero para Brasil y Perú”, subrayando que la presencia económica china se ha ampliado no solo en comercio, sino también en inversión, infraestructura y cooperación tecnológica. Según datos oficiales, el intercambio China–ALC superó los 500 mil millones de dólares el año pasado por primera vez.
“En los primeros diez meses de este año, el volumen del comercio China–ALC se aproximó a los 450 mil millones de dólares, con un crecimiento del 3,5% pese a los vientos en contra de la economía global”, apuntó Wei. Añadió que ese dinamismo convierte a América Latina y el Caribe como “un miembro importante del Sur Global” y una región estratégica para China en su agenda de desarrollo.
Al detallar los cinco programas del documento, el ministro asistente señaló que el Programa de la Solidaridad busca reforzar los intercambios políticos de alto nivel; el Programa para el Desarrollo Global apunta a profundizar la cooperación vinculada a la Iniciativa de la Franja y la Ruta; el Programa de las Civilizaciones promoverá un mayor intercambio cultural y educativo; que el Programa de la Paz abordará temas de seguridad internacional; y que el Programa de los Pueblos se centrará en la gobernanza y el desarrollo social.
“China está dispuesta a trabajar con los países de ALC, utilizando la publicación del documento como un trampolín para avanzar en una comunidad con un futuro compartido”, concluyó. Es importante mencionar que los dos primeros documentos de este tipo publicados por China se realizaron en el 2008 y 2016 respectivamente.
Uruguay observa con expectativa las nuevas políticas
Tras la presentación, el embajador de Uruguay en China, Aníbal Cabral, analizó en diálogo exclusivo con Diario La R el impacto que estas nuevas directrices pueden tener tanto para Uruguay como para la región.
Cabral destacó que el vínculo entre ambos países “es histórico” y que desde 1988 constituye una política de Estado sostenida más allá de los cambios de gobierno. “Vemos con expectativa todas las iniciativas que haga China, especialmente las orientadas hacia América Latina y el Caribe”, señaló.

Aunque consideró que aún es temprano para identificar qué áreas específicas podrían ser más favorables para Uruguay, el diplomático marcó que esa evaluación se realizará en el marco bilateral. “Seguramente vamos a analizar aquellas áreas que resulten más convenientes para Uruguay”, sostuvo.
Cabral también recordó que Uruguay asumirá en 2025 la presidencia pro tempore de la CELAC, lo que coloca al país en una posición relevante dentro del diálogo China–ALC y que eso genera un “fuerte compromiso con la región”. “Cómo presidencia vamos a tener que implementar el programa que se definió en mayo pasado entre China y CELAC. Nuestros compromisos ya están plenamente asumidos”, afirmó.
El embajador destacó que la nueva política china retoma los consensos alcanzados en la última reunión China–CELAC, celebrada con la presencia del canciller uruguayo en representación del presidente Yamandú Orsi. “Ahora nos toca, como región, definir cuáles serán los temas más urgentes y dónde habrá mayor énfasis”, añadió.
Sobre la relación económica, Cabral subrayó su solidez: “El comercio entre Uruguay y China es histórico. Este año, nuevamente, China será nuestro principal socio tanto en exportaciones como en importaciones”. Además, recordó que China es un actor central en materia de cooperación y que el nuevo documento puede potenciar áreas ya en desarrollo. “Creemos que los logros alcanzados año a año se van a consolidar con este nuevo plan, que refleja las áreas en las que ya veníamos trabajando como región”, concluyó.

