Seguro ya escuchaste varias veces lo importante que es consumir frutas en nuestro día a día, y que deben ser la base de nuestra alimentación.
Todos los alimentos de origen vegetal nos aportan, en mayor o menor medida, vitaminas, minerales y fibra principalmente celulosa y pectinas, que nos ayudan a tener buen funcionamiento en nuestro organismo y que son necesarios para mantener sus procesos internos.
Las frutas se recomienda consumirlas casi siempre enteras, ya que al consumirlas en forma de zumo perdemos por un lado una buena cantidad de fibra, y por otro, la sensación de saciedad que percibimos a través de la masticación. Las frutas enteras, con piel siempre que sea posible deben formar parte de nuestros menús saludables a diario.
Quizás el aporte de más valor que tienen las frutas son sus vitaminas, unos nutrientes inorgánicos que nos resultan imprescindibles para la vida.
Vitaminas A, C, B1, B2, B6, ácido fólico además de minerales como potasio, hierro, calcio, magnesio, zinc, sulfatos, fosfatos, cloruros son los principales elementos que encontramos en todas ellas.
En primavera lo más recomendable son frutas cítricas que ayudan a mejorar el sistema respiratorio y nuestras defensas gracias a la vitamina C que nos aportan, las mejores opciones pueden ser: naranjas, limón, mandarinas y también puedes consumir otras como: frutilla, frambuesa, kiwi, pomelo, durazno, ciruela, melocotón, banana y melón; algunas para aumentar la salud intestinal y otras te ofrecen enriquecerte de colágeno para mantener la piel y el cabello en buen estado.
