El director del Hemocentro de Maldonado, Dr. Jorge Curbelo, destacó en diálogo con el programa Panorama 1410 de Radio La R que una de las principales preocupaciones es el stock de sangre. Claro está que sin las muestras resulta imposible que los pacientes reciban el tratamiento necesario. “Si no tenemos donantes no tenemos como poder hacer el tratamiento, sea una intervención o un tratamiento por radioterapia o quimioterapia en pacientes oncológicos. Puede haber un accidente de tránsito y que necesiten sangre, plaqueta o plasma y para obtenerlo tenemos que tener la disposición en el momento requerido, tampoco podemos esperar exactamente el instante donde se necesite porque se corre el riesgo de perder la vida del paciente”, afirmó.
En torno a las dificultades que se presentaron en las donaciones por motivo de la pandemia del Covid-19, el director del Hemocentro de Maldonado alegó que muchas veces se tiene una visión centralista de las problemáticas. El hecho de que haya descendido la cantidad de donantes en Montevideo, no implica que en el interior también ocurriera. Esto depende de dónde se consultasen los datos, ya que la estadística de las donaciones varía. De todas formas, ese descenso de personas donantes en la capital se dio por motivos tan obvios como lo son la seguridad y la salud del individuo puesto a que la mayoría de los Hemocentros están situados dentro de servicios asistenciales, sea un hospital o un sanatorio. Entonces, está corriendose el riesgo de exponer a una persona sana ante condiciones riesgosas de salud.
Afortunadamente no hay necesidad de preocuparse por el número de donantes en Uruguay. Si bien es cierto que las estadísticas varían en función de la fuente a la que se consulte, el doctor afirma que hasta el momento nadie se ha quedado sin realizar un tratamiento ni mucho menos ha fallecido por falta de recursos, y atribuye esto, en parte, al sistema que tienen con otros bancos para el intercambio de los recursos requeridos.
Otro de los aspectos positivos comentados es que logísticamente existe una buena organización y gestión de los productos en cuestión. “Obviamente que cada producto tiene su temperatura para poder hacer el traslado. Nosotros hemos implementado un sistema de cajas de espuma plast donde hay un datalogger, que es lo que gestiona la temperatura. Tenemos toda el área de calidad del Hemocentro dónde permanentemente se monitorea que los productos lleguen en condiciones y con las temperaturas adecuadas para que puedan ser utilizadas en cualquier centro del país”, comentó Curbelo.
En el marco de la concientización de la importancia del donante de sangre, se han realizado numerosas actividades de difusión. Uruguay cuenta con el servicio de reserva del turno para la donación de sangre mediante el convenio con la licencia de conducir en el Hemocentro nacional, que aún sigue vigente en Maldonado, Rocha, Lavalleja y recientemente acaba de sumarse Treinta y Tres. Esta iniciativa es de suma importancia también para poder generar una perspectiva responsable en torno a la seguridad de tránsito y la responsabilidad que conlleva tener un permiso de conducir.
En torno a los beneficios de este convenio, el director del Hemocentro de Maldonado afirma que “el 70 por ciento de los que viene por primera vez a donar por libreta, después vuelven a donar, gente que no estaba dentro del sistema de donación. Para nosotros realmente hay buenos números y argumentos del por qué ha servido el sistema de las libretas de conducir. Seguiremos demostrándolo porque estamos convencidos de que a la larga aportaremos a disminuir los accidentes de tránsito como hemos demostrado con las escuelas”.
Otra de las importantes iniciativas que se han llevado a cabo es la del “Plan Escuelas” que está dirigido a niños de quinto año de todas las escuelas públicas y privadas del país. El Hemocentro tiene implementado un sistema logístico de locomoción para transportar a los niños desde el punto donde se encuentre la escuela hacia el mismo. Allí les brindan una recorrida y una explicación acerca del funcionamiento y procesamiento de la extracción de sangre. También se nutren de vídeos informativos y educativos; luego, en conjunto con la docente y la directora de la escuela se genera una jornada didáctica de donación en la misma escuela donde los niños son los encargados de traer a sus padres, hermanos o vecinos con el fin de atraer más donantes y ser conscientes de la importancia que todo esto tiene. Desde una corta edad se les inculca el valor del voluntariado y la importancia de ayudar a quien lo necesita. Junto al “Plan Escuelas” se suma el Plan de Educación Vial que es brindado a la población más joven también y consiste en educar a los niños respecto a las normativas de tránsito.
Con respecto a las desmitificaciones que son necesarias, el Dr. Curbelo desmiente la popular afirmación de que para la extracción de sangre sea necesario ayunar. “Muchas veces ese mareo, ese malestar o la no tolerancia a la donación es por el ayuno. Yo lo aprendí por primera vez cuando hice la pasantía en Francia hace más de 15 años y quedé asombrado porque acá en ese momento había ayuno hasta de seis horas y allá la gente iba, hasta almorzaba inclusive previo a la donación, y se le aceptaba sin ningún problema. Había muy poca gente con malestar después de la donación, mientras que en Uruguay teníamos un índice muy grande de gente con malestar o dificultad para recuperarse tras la donación”, sentenció.
Más datos:
Por último, parece importante clarificar que contrario a lo que se creía, los diabéticos pueden donar sangre (siempre y cuando estén tratados con dieta o medicamentos vía oral). Lo mismo ocurre con los hipertensos medicados.