David Bonderman, quien administró el dinero de una de las familias más ricas de Texas, ayudó a crear uno de los gigantes del negocio de capital privado e impulsó la llegada del hockey profesional a Seattle falleció a los 82 años.
La muerte de Bonderman fue anunciada por TPG, la empresa de gestión de activos que cofundó, su compañía de inversiones Wildcat Capital Management, el equipo de hockey Seattle Kraken y su familia.
Durante gran parte de su carrera, Bonderman mantuvo un perfil bajo en público y rara vez concedió entrevistas a organizaciones de noticias. Se concentró en adquisiciones corporativas y otras inversiones, muchas de las cuales fueron altamente rentables. En abril se estimaba que su riqueza ascendía a los 6.400 millones de dólares.
“Rara vez era la persona más ruidosa en la sala, pero a menudo era la más inteligente. David se mantuvo humilde y una vez dijo que su fortaleza personal era ‘no saber mucho sobre algo, pero saber lo suficiente para tomar una decisión decente’”, dijeron su familia y sus empresas en un comunicado.
El director ejecutivo de Kraken, Tod Leiweke, dijo que Bonderman jugó un papel en la creación del logotipo y la marca del equipo. “David era un visionario, no tenía miedo de afrontar desafíos y tomar decisiones audaces. Era inteligente, ingenioso, curioso y humilde”, afirmó Leiweke.
Como inversor, Bonderman tenía una vena contraria y no temía ofender a los demás, ni siquiera a los de la Casa Blanca. Pese a las objeciones de la administración Obama, asistió a los foros económicos anuales del presidente ruso Vladimir Putin en 2014 y 2015, después de que Estados Unidos le impusiera sanciones.