Un Llamado a la Conciencia y la Empatía en Uruguay
Por Paola Granatis Ospina
Cada 4 de octubre, el mundo celebra el Día Mundial de los Animales, una fecha que busca concienciar sobre la importancia de la protección y el bienestar de todas las especies que habitan nuestro planeta. Este día no solo se conmemora la diversidad de la fauna y la flora, sino que también se convierte en una oportunidad para reflexionar sobre el papel que desempeñamos como seres humanos en la preservación de la vida animal.
La celebración de este día fue proclamada en 1931 durante un congreso de ecologistas en Florencia, Italia, con el objetivo de promover la defensa de los animales y sus derechos. Desde entonces, el 4 de octubre se ha convertido en un símbolo de unidad en la lucha por un mundo más justo y compasivo hacia todas las criaturas. La fecha coincide con el día de San Francisco de Asís, conocido como el santo patrono de los animales, lo que añade un matiz espiritual a la celebración.
En Uruguay, la conmemoración del Día Mundial de los Animales se vive con especial intensidad, ya que el país tiene un profundo respeto por la fauna y la flora autóctonas. A lo largo de los años, diversas organizaciones no gubernamentales, refugios de animales y grupos de voluntarios han trabajado incansablemente para promover la adopción responsable, la tenencia ética de mascotas y la protección de especies en peligro de extinción. Este día se convierte en una plataforma para difundir mensajes sobre la importancia de cuidar y respetar a los animales, así como de fomentar la educación sobre el bienestar animal.
Las actividades que se llevan a cabo en Uruguay son diversas y enriquecedoras. Desde ferias de adopción y eventos educativos hasta charlas sobre la tenencia responsable de mascotas, los uruguayos se unen para celebrar la vida animal y fomentar una relación más armónica entre los humanos y los animales. Las redes sociales también juegan un papel crucial en la difusión de mensajes positivos, permitiendo que las historias de animales rescatados y adoptados lleguen a un público más amplio, inspirando a otros a unirse a la causa.
El carácter humanitario de esta celebración es innegable. Al recordar que los animales son seres sintientes que merecen respeto y cuidado, se invita a la sociedad a reflexionar sobre las injusticias que enfrentan, desde el abandono y el maltrato hasta la extinción de especies. La empatía hacia los animales no solo es un signo de compasión, sino que también es un reflejo de nuestra capacidad para conectar con otras formas de vida y reconocer que todos compartimos este planeta.
La celebración del Día Mundial de los Animales en Uruguay es una invitación a tomar acción. Cada uno de nosotros puede hacer una diferencia, ya sea a través de la adopción de un animal, la promoción de campañas de esterilización, o simplemente educando a otros sobre la importancia de tratar a los animales con dignidad. La unión de la comunidad, el amor por los animales y la conciencia ambiental son pilares fundamentales para construir un futuro en el que todos los seres vivos puedan coexistir en armonía.
El Día Mundial de los Animales es más que una fecha en el calendario; es un recordatorio de nuestra responsabilidad hacia aquellos que no tienen voz. En Uruguay, esta celebración resuena con fuerza, uniendo a la sociedad en un esfuerzo colectivo por proteger y cuidar a nuestras mascotas y a la vida silvestre. Al adoptar una postura empática y humanitaria, no solo enriquecemos nuestras propias vidas, sino que también trabajamos hacia un mundo más justo y compasivo para todos los seres que comparten nuestro hogar.
En Uruguay tenemos algunas especies de animales que no van a desaparecer, algunos con 2 pezuñas, otros se arrastran por los suelos… de esta última variedad tenemos a la YARACarol» QUE ES VENENOSA Y ATACA SIEMPRE SIN PREOCUPACIONES… En cuanto a los de DOS PEZUÑAS, tenemos una enorme variedad,…. Por ejemplo el «abadalaso que siempre trata de morder, incluso toma alcohol.. entonces es más peligroso.. Está el «conejo negro» una variedad que oculta la cabeza pero sigue largando sonidos. (por el culo) tenemos otra especie el «orsido» que viene por un lado luego cambia de idea y se va para otro….
Y también tenemos algunos con nombre propio que aparecen en esta columna