El Gobierno de Chile convocó ayer a una reunión de emergencia del Comité Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (COGRID) ante el corte de luz masivo que afectaba anoche prácticamente a la totalidad del país. La ministra del Interior, Carolina Tohá, ha comparecido ante los medios de comunicación para «dar tranquilidad» ante el episodio de apagón que afectó desde la región de Arica y Parinacota, en el extremo norte del país, hasta Los Lagos, en el sur. Tohá ha descartado que se trate de un ataque a la red y ha apuntado a la desconexión de la red de transmisión Norte Chico, cerca de la frontera con Perú. El Coordinador Eléctrico Nacional de Chile ha asegurado que centra sus esfuerzos en recuperar el sistema eléctrico a la mayor brevedad.
«Esto es una falla del sistema, no es un ataque», ha aseverado la ministra Tohá, que ha hecho un llamamiento a la población a evitar desplazamientos innecesarios y ha vaticinado que en las próximas horas podría recuperarse el abastecimiento, aunque en caso contrario el Gobierno prepara «medidas».
Estimaciones de las autoridades apuntan a que el incidente afecta al menos a 1,1 millones de personas y que entre las infraestructuras afectadas se encuentra el sistema de Metro de la región Metropolitana, donde se ubica la capital chilena, Santiago. El Gobierno no ha detectado «situaciones de emergencia derivadas del evento».