Hemos ingresado en una época del año en que el proyecto de rendición de cuentas acapara todas las miradas y trabajo en el Parlamento nacional. Como integrante por la bancada del Frente Amplio de la Comisión de Hacienda y Presupuesto de Diputados tenemos una gran y doble responsabilidad. Por un lado, defender la visión que nuestra fuerza política tiene respecto del proyecto de rendición de cuentas y la necesidad de destinar más recursos a sectores de la población que aún permanecen en situación de vulnerabilidad. Por otro lado, estoy concentrado en defender áreas que son clave para nuestro Departamento y que no han sido suficientemente contempladas en este Proyecto de Rendición de Cuentas.
¿Cuál será nuestra actitud ante el proyecto de rendición? Quisiera definir cinco conceptos que ilustran la forma en que encararemos este trabajo: Estudio, Escucha, Empatía, Propuesta y Comunicación. Primero, me dedicaré al estudio del proyecto de rendición de cuentas y todo el equipo de diputación está abocado a ello, con el objeto de identificar todas las oportunidades de poder mejorarlo. En segundo lugar, es necesaria cultivar la escucha activa de todas las delegaciones que visitarán el Parlamento nacional. En tercer lugar, con la escucha viene necesariamente la empatía, la capacidad de ponerse en el lugar del otro, de entender cómo es estar en los zapatos de quienes más sufren por las condiciones económicas y sociales que estamos transitando. En cuarto lugar, ejerceremos siempre una actitud proactiva, de propuesta, de tratar de identificar siempre las soluciones a los problemas reales de la población. Y en quinto lugar estaremos comunicando permanentemente las actividades que se van a ir desarrollando a lo largo de este mes y medio de trabajo.
¿Con qué panorama nos encontramos inicialmente? El proyecto de rendición de cuentassigue el mismo enfoque económico y tecnocrático que ha tenido el gobierno hasta el día de hoy, no fomentar proyectos sociales que atiendan activamente la dura situación que están viviendo miles de uruguayos en situación de vulnerabilidad. ¿Y cómo se expresa esto en el proyecto de rendición de cuentas?
Veamos conceptos y cifras. En primer lugar, el gobierno desconoce absolutamente la cruda realidad social que aún viven miles de compatriotas que han caído en el desempleo o que incluso teniendo trabajo han caído en la pobreza, o incluso indigencia, producto de la carestía de la vida. Tanto en el proyecto, como en la exposición de la Ministra de Economía y el Director de OPP ante la Comisión, se expone una realidad paralela a la que sufren tantos hogares. Y claro, viviendo en esa realidad paralela, se explica por qué este es un proyecto de rendición de cuentas tan insensible y alejado de los problemas que acechan al común denominador de las familias uruguayas.
Y para muestra un botón. Si bien en futuras columnas iré expresando mi punto de vista específico sobre algunos temas claves como gasto en educación, gasto en vivienda y fondos para el desarrollo del interior, permítame compartir un vistazo a la incomprensión que tiene este proyecto de rendición de cuentas para personas en situación de vulnerabilidad.
Primero, los trabajadores. De acuerdo a las estimaciones del proyecto de rendición de cuentas, el incremento del PIB en el quinquenio será del 8,78%, un porcentaje que significa un aumento de la riqueza generada de US$ 5.350 millones.Si en el mejor de los casos, el salario real tiene el mismo nivel al final del período que al comienzo del gobierno, en realidad lo que vamos a ver es que quienes se van a beneficiar exclusivamente económicamente serán los grupos empresariales, sin que se derrame un centavo al sector de los trabajadores.
Ni que hablar que la eliminación de la reducción de dos puntos de IVA para la compra usando medios electrónicos lo que hizo fue subir los impuestos a todos los uruguayos, pero pesando mucho más en quienes destinan mayormente el ingreso de sus salarios para la comida.
En el mismo sentido regresivo el proyecto de rendición de cuentas propone una disminución de recursos a la UDELAR a través de la eliminación del adicional del Fondo de Solidaridad, que iría bajando un 25% anualmente hasta desaparecer en 2026. Esto deja sin brazos a la Universidad para ayudar a aquellos estudiantes, sobre todo del interior del país que gracias a ese fondo pueden acceder a costear su vida mientras estudian. ¿Cuál es la consecuencia? Pues una vez más, se trata de políticas que favorecen a los que ya han sido favorecidos por el mercado y no a quienes más lo necesitan.
La rendición no adjudica ningún incremento para la Universidad de La República, siendo esto vergonzoso luego de que haya sido dicha institución quién lideró los programas de acción durante la emergencia sanitaria por COVID-19. Al final del período el presupuesto real de la UDELAR caerá 7,6% al final del período si no tiene partidas incrementales.
Otro de los aspectos críticos del proyecto de rendición de cuentas es la situación en que deja a la Administración de Servicios de Salud del Estado (ASSE) –en especial en la entrega de medicamentos- aspecto que es central para personas mayores, embarazadas, niños y niñas.
A su vez, el proyecto da cuenta de una caída del 7% en el 2021 respecto al año anterior en las inversiones en materia de vivienda, lo que supuso una disminución en las escrituraciones de cooperativas, y por ende agrava la situación de las personas que no cuentan con una vivienda digna hoy en día.
Nuestra premisa es avanzar sin dejar a nadie atrás, y lamentablemente este proyecto de rendición de cuentas lo que hace es dejar a muchos uruguayos librados al azar del mercado en temas claves como educación, salud y vivienda. ¿Es ese el Uruguay que queremos construir? ¿Estos eran entonces los mejores cinco años de nuestras vidas? Los números importan, pero estamos en política para mejorar la vida de las personas, en especial de quienes están en situación de vulnerabilidad, por eso recordaremos al gobierno y la bancada oficialista que siempre el foco debe estar en la gente.
