Diario La R: ¿Cómo evalúa la campaña electoral que acabamos de transitar?
Constanza Moreira: Bueno, fue una campaña para corredores de fondo, una campaña que empezó en marzo y termina ahora en noviembre. Fue muy exigente y cargada. Desde el primer momento, el Frente Amplio puso toda la carne en el asador, y eso permitió alcanzar los 412 mil votos en la primera vuelta.
Luego, la campaña para la segunda vuelta también fue súper exigente. El Frente Amplio se rearmó internamente, y lo mismo hicieron otros partidos, que pasaron por procesos de reestructuración en sus ofertas electorales. Aunque la campaña de octubre arrancó un poco tarde, fue tremendamente intensa.
Diario La R: ¿Qué considera que estuvo en juego en esta elección?
Constanza Moreira: En esta elección se jugó lo de siempre: el impulso y el freno, los dos proyectos de país. Por un lado, el país progresista y del campo popular, y por otro, el país conservador y de los recursos económicos. Es una disputa histórica que ya vimos al inicio del siglo pasado, entre el batllismo y el conservadurismo. Aunque los actores hayan cambiado, el país sigue siendo de dos mitades, con desempates siempre ajustados.
Diario La R: ¿Cuáles son, en su opinión, las prioridades más urgentes para el país?
Constanza Moreira: La urgencia número uno es recuperar la sustentabilidad de las empresas públicas. Hay que poner el ojo en eso desde el día uno. Por ejemplo, es clave activar una protesta o un llamado a impedir que el gobierno firme el proyecto NEPTUNO a las apuradas. Si lo firman ahora, tendremos que pagarlo después.
Además, hay que atender el esquema de negocio de UTE, que está muy perforado. Luego vienen las prioridades habituales: salud y educación. La salud está muy mal, especialmente en el sector privado, donde falta acceso a medicamentos. Eso ha sido un tema importante en esta campaña.
Diario La R: Mencionó la pobreza infantil como una preocupación. ¿Qué propone al respecto?
Constanza Moreira: Sí, me preocupa mucho. Creo que hay que priorizar la situación de los hogares con jefatura femenina sin cónyuge, que son los que están mostrando un mayor aumento en el porcentaje de niños viviendo en pobreza y extrema pobreza. Este es un tema que debe marcar la agenda desde el inicio.