Fue detenido luego de un trabajo de inteligencia un ex policía de 78 años como sospechoso de estar involucrado en las dos bolsas que aparecieron en octubre, en la puerta de la casa de una activista de derechos humanos (DDHH).
Informó el fiscal del caso, Fernando Romano, a través del vocero de la Fiscalía, Javier Benech. Romano prevé imputar al hombre, que trabajó en la Policía en el entorno de la década de 1960.
La bolsa con huesos tenía un mensaje firmado, atribuido a la Juventud Uruguaya de Pie (JUP). Uno de los mensajes decía: «Giles, acá hay huesos, no hay en los cuarteles». El otro indicaba: «Topolansky asesina susia» (sic).
La verdad no se puede comentar algo de un pobre viejito demente, espero que pronto sus huesos descansen en paz