El expresidente de Filipinas, fue trasladado a La Haya el martes, luego de ser detenido en el aeropuerto de Manila por una orden emitida por la Corte Penal Internacional (CPI). Duterte se enfrenta a cargos de crímenes contra la humanidad, relacionados con su controversial y letal guerra contra las drogas durante su mandato (2016-2022).
Las organizaciones de derechos humanos estiman que la campaña de Duterte resultó en decenas de miles de muertes, muchas de ellas de hombres pobres, en su mayoría sin pruebas claras de su vínculo con el narcotráfico. La CPI abrió una investigación en 2016, y el expresidente ahora deberá comparecer ante la corte para enfrentar las acusaciones de «crímenes contra la humanidad por asesinato».
El vuelo que traslada a Duterte despegó de Manila a las 23:03 hora local (15:03 GMT) y se dirige a la sede de la CPI en Países Bajos. En una rueda de prensa, el presidente filipino, Ferdinand Marcos, confirmó el despegue del avión y la intención de que Duterte responda por las acusaciones en su contra.
Una vez que el expresidente llegue a La Haya, será llevado a la CPI, donde se programará una audiencia inicial para su comparecencia.
