El martes 1 de marzo, el presidente de Antel, Gabriel Gurméndez, anunció que la cadena rusa Rusia Today (RT) había sido dada de baja de Antel Vera, justificando ese accionar en que RT es un canal “al servicio de la propaganda y justificación de la violenta invasión militar de Rusia a Ucrania, acción condenada por nuestro país”.
Ayer, miércoles 2, el senador Guido Manini Ríos citó la noticia dada por el diario El País, tuiteando: “No estamos de acuerdo. Ni en los peores momentos de la Guerra Fría se hizo algo igual… ¡Nosotros creemos que la libertad de expresión debe respetarse siempre! No importa qué se dice, quién lo dice ni a quién defiende. ¡Importa la libertad!”, arrobando a su sector político, Cabildo Abierto.
A esta postura se sumó el diputado frenteamplista Javier Umpiérrez, realizando un pedido de informes y considerando que lo que hizo Antel “es un atropello a la libertad de prensa”.
La embajada de Rusia, por su parte, emitió un comunicado lamentando la actitud de Antel y recordando que se puede acceder al sitio de la embajada vía Telegram, lugar donde se suben las noticias de ese país: “Ante la creciente política agresiva de las redes sociales occidentales y sus intenciones de silenciar todos los puntos de vista alternativos, les recordamos que la Embajada tiene su canal en Telegram donde se comparten las últimas noticias sobre nuestro país”.
Manini Ríos a Diario La R
Se recuerda que en la entrevista que le realizara Diario La R a Manini Ríos, se le preguntó al senador por el papel que jugaba la prensa en el conflicto, contestando el legislador: “Siempre se dijo que la primera víctima en toda guerra es la verdad. Hoy mismo miramos la prensa y lo que dice Ucrania es lo contrario de lo que dice Rusia. Cada uno dice lo que le sirve, porque acá hay mucho de guerra psicológica. En estos casos, si alguien quiere torcerle la voluntad de guerra al enemigo –y estamos hablando de guerra, por lo que la palabra enemigo corresponde- hay que desmoralizarlo y convencerlo de que no tiene posibilidades de éxito. Entonces uno ve al presidente ucraniano diciendo que Rusia no ha avanzado nada y que le han hecho fracasar todos sus planes, mientras que el presidente de Rusia dice que detuvo la ofensiva para dar espacios al diálogo, pero que ahora la va a reiniciar de manera más enérgica. Es decir, que cada cual presenta la situación a su favor, porque está en juego la parte anímica, moral del enemigo, al que para hacerlo ceder necesitan quebrarlo. Entonces, la verdad es lo último que se va a respetar en una guerra. Eso es sabido. Periodistas de guerra objetivos, capaces de informar aportando certezas desde el campo de batalla, también pueden tener como obstáculo el hecho de que con la progresión de los acontecimientos, se le restringe tanto su margen de acción que tampoco pueden ver el panorama de la guerra en su conjunto. Eso en lo que se refiere a la prensa. En las redes lo que hay son versiones muy parciales. Son testimonios que se pueden considerar, pero es difícil confirmar su veracidad”.