El hidrógeno verde es un tipo de hidrógeno producido a partir de fuentes de energía renovable, como la energía solar, eólica o hidroeléctrica, a través de un proceso llamado electrólisis. En este proceso, se utiliza electricidad generada de manera sostenible para separar el agua en hidrógeno y oxígeno.
A diferencia del hidrógeno marrón o gris, que se produce a partir de combustibles fósiles y genera emisiones de gases de efecto invernadero, el hidrógeno verde se considera una fuente de energía limpia y sostenible, ya que su producción no implica el uso de combustibles fósiles ni la emisión de dióxido de carbono.
El hidrógeno verde tiene un gran potencial como vector energético y puede ser utilizado en diversas aplicaciones, como en la industria, el transporte, la generación de electricidad y como almacenamiento de energía, contribuyendo así a la transición hacia sistemas energéticos más sostenibles y reduciendo la dependencia de los combustibles fósiles. Un combustible que se postula como el vector energético clave para alcanzar la descarbonización del planeta y cumplir con los compromisos marcados para el 2050 en la lucha contra el cambio climático.
Con respecto a su producción, según los datos obtenidos por el Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM), “el método que se vislumbra con mayor potencial para la producción de hidrógeno verde es la electrólisis del agua (H₂O), de forma tal que, a partir de energía eléctrica proveniente de fuentes renovables y agua (H₂O), se obtienen por separado hidrógeno (H₂) y oxígeno (O₂). Por tanto, la producción del hidrógeno verde es un proceso con cero emisiones de gases de efecto invernadero”.
Los estudios que ha realizado el Panel Intergubernamental del Cambio Climático, indican que para el año 2050 debemos de llegar a ser carbono neutrales, por lo cual, los países que fueron convocados en el marco del Acuerdo de París en 2016, en el contexto de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, cada uno de ellos, estableció medidas para la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero, las cuales se están implementando y se continúa desarrollando regulaciones al respecto.
Situación en Uruguay
En Uruguay, se ha culminado la primera etapa de transformación energética, a partir de la descarbonización casi total de la matriz eléctrica. Según datos del MIEM, entre los años 2017 – 2020, el 97% de la electricidad generada en nuestro país provino de energías renovables, siendo el 44% hidro, 32% eólica, 18% biomasa, 3% solar y un 3% térmica fósil.
El panorama para la producción de hidrógeno verde en nuestro país es favorable, ya que la calidad y abundancia de los recursos eólicos y solares permitirán lograr costos competitivos para la producción de hidrógeno a escala. A su vez, nuestro territorio cuenta con centrales hidroeléctricas, una infraestructura de red de transporte de energía eléctrica, una matriz eléctrica de un 97% renovable (porcentaje logrado en menos de una década), una gran disponibilidad acuífera y fácil acceso de CO2, lo que permite una producción competitiva de combustibles sintéticos como el e-metanol y e-jetFuel.
La incorporación de hidrógeno verde dará a Uruguay un mejor desarrollo industrial, económico y laboral, así como una mayor independencia energética, la disminución de la vulnerabilidad respecto a los cambios en precios del petróleo y ahorro de divisas. Por otra parte, permitirá la creación de nuevos puestos de trabajo y colocará al país como un lugar proveedor y receptor de inversiones.
En la apertura de LATAM Renovables y el IV Congreso WEC Capítulo Uruguay, organizado por la Asociación Uruguaya de Energías Renovables el martes 30 de julio, la Ministra Elisa Fasio destacaba que “Podemos pasar de ser importadores de energías a exportar a países de Europa y Asia”, también agregó que “La estrategia del hidrógeno verde necesita de una estrecha y fluida articulación con el sector privado, la academia y la sociedad”. Por otra parte, agregaba que las energías renovables son sostenibles, ambiental y económicamente porque conviven con la forestación y ganadería.
Dentro de los estudios realizados, se estima que el hidrógeno verde y sus derivados pueden alcanzar una facturación estimada en 2.000 millones de dólares anuales para el año 2040.
Toda la inversión que promete esta actividad, la vamos a pagar nosotros y mucho más.
Lamentablemente la fama de este gobierno entreguista y corrupto atrae inversiones, buitre oscuras y secretas.
Donde unos pocos corruptos se envuelven de «verde» no por la limpieza, sinó por los billetes, en detrimento de la nación.
Ese hidrógeno será utilizado para combustibles sintético en motores igual de contaminantes que los actuales, el verde es tongo y las inversiones las pagaremos nosotros.
[…] La nafta Súper 95 se mantiene a $ 77,54 el litro como precio máximo de venta al público, mientras que el Gasoil 50S seguirá a $ 52,42 por litro. El supergás continuará a $80,75 por kilo. […]
Me remito al primer comentario, en esa línea interpreto el «saqueo» de recursos naturales de este tipo, con poca o nula experiencia de los buitres privado extranjeros, que harán pasar los desajustes con «subsidio» del Estado u otros beneficios irritables al común productor o empresario clásico que no tiene beneficios, con los UPM1 u UPM2, etc.Finalmente en el mediano plazo pagará el pueblo uruguayo si no se investiga a fondo este negocio y sus consecuencias, entre ellas de convertirnos en DEUDORES SERIALES hundiendo más al país de lo que está….No a la improvisación , más control nacional del Estado .Como ingeniería jurídica que cierre la trampa y la estafa en este negocio al capital privado externo y/o asociado con testaferros criollos. No a la Corrupción…!
Miguel Serrat.
Esto no va a funcionar, el Hidrogeno se va a producir localmente por el costo de transportarlo. En USA las mismas estaciones de servicio producen H2 en el fondo en plantas portatiles, porque el transporte es carisimo…asi y todo las estaciones conm H2 son casi inexistentes. Ojalá que no se meta la ancap en esto o vamos a terminar otra vez pagando millones y millones para que un puñado de sindicalistas tenga trabajo. Esperemos que ancap siga su ciclo natural de desaparcion como va a pasar con todas las refinerias y desaparezca.