La Junta Departamental de Montevideo (JDM) realizará un acto de homenaje a Nibia Sabalsagaray, en conmemoración de los 50 años de su asesinato durante la dictadura civil y militar uruguaya. El evento tendrá lugar mañana martes 10 de setiembre a las 16 horas en la Sala de Sesiones de la institución. Según lo difundido por la Junta, «el homenaje se desarrollará en el marco de los 50 años de su asesinato a manos de represores de la dictadura». En el evento, harán uso de la palabra la presidenta de la Junta, edila Patricia Soria, y el presidente de la Comisión de Nomenclatura, edil Diego Revetria.
“Para mi como Presidenta de la Junta Departamental de Montevideo no sólo es un honor poder presidir un acto homenaje a Nibia Sabalsagaray, también es una obligación ética y moral”, expresó a Diario La R, la edila Patricia Soria. Para Soria la importancia del caso radica en que “es el Estado reconociendo lo que sucedió. Que no fue un suicidio como quisieron hacer creer… que Nibia fue asesinada por el terrorismo de Estado en una sesión despiadada de tortura”, remarcó.
“Homenajear a Nibia es Homenajear también a toda la juventud que ese momento se atrevió a soñar en grande y a todo el Pueblo uruguayo que hoy sigue reclamando memoria, verdad, justicia y nunca más terrorismo de Estado”, concluyó Soria en diálogo con La R. En la sesión del 5 de setiembre, la JDM aprobó dos iniciativas relacionadas con Sabalsagaray. «Por un lado, se remitió una minuta de aspiración a la Intendencia para designar un espacio público con su nombre en el barrio Peñarol, en la intersección de Camino Casavalle y Hamburgo». Esto se realiza buscando reconocer su legado y preservar su memoria en un lugar emblemático de la ciudad.
Además, la Junta declaró de interés el Concurso Literario «Nibia Sabalsagaray Curutchet. A 50 años de su asesinato», organizado por la Asociación de Amigas y Amigos del Museo de la Memoria. «El objetivo del concurso es promover los Derechos Humanos y la memoria de la lucha por la libertad, la democracia y la justicia social», destacaron en el comunicado.
Nibia
Sabalsagaray, profesora de literatura y militante de la Unión de Juventudes Comunistas en Nueva Helvecia (Colonia), fue secuestrada el 29 de junio de 1974 del hogar estudiantil donde residía. La joven fue llevada al Batallón de Ingenieros N°5, donde sufrió torturas que le provocaron la muerte por asfixia ese mismo día. Este suceso ocurrió en un contexto de represión y violencia sistemática por parte de las fuerzas de seguridad del régimen que tuvieron lugar desde los años 1968 a 1984. Hija de un trabajador textil de la fábrica Campomar y Soulas, Nibia Sabalsagaray fue destacada por sus compañeros y profesores como una estudiante excepcional.
En 1968, ingresó al Instituto de Profesores Artigas (IPA) para estudiar Literatura, donde sobresalió por su inteligencia, creatividad y profundo compromiso social. Participó activamente en la Agrupación gremial Renovación del Centro de Estudiantes del IPA (CEIPA) y formó parte de la Unión de la Juventud Comunista del Uruguay (UJC). El 29 de junio de 1974, fue detenida en su domicilio a las dos de la mañana y trasladada al Batallón N° 5. Ese mismo día, al mediodía, las autoridades informaron a su familia sobre su muerte, calificándola como suicidio y entregando el féretro con la prohibición expresa de abrirlo.
La familia desobedeció esta orden, y Marcos Carámbula, en ese entonces estudiante de Medicina a punto de recibirse, constató las numerosas señales de tortura en el cuerpo de Nibia. También observó que las marcas en su cuello no coincidían con las que una persona podría provocarse a sí misma. El 8 de septiembre de 2004, su hermana Estela Sabalsagaray presentó una denuncia legal para investigar las circunstancias que rodearon la muerte de Nibia. En 2005, el Gobierno del presidente Tabaré Vázquez excluyó el caso de Nibia Sabalsagaray de la Ley de Caducidad, dado que en su detención habrían estado involucrados civiles, según la denuncia presentada por su hermana ante la Justicia. La investigación judicial confirmó su asesinato, lo que llevó en 2010 al procesamiento de los represores Miguel Dalmao y José Chialanza como coautores de homicidio especialmente agravado.
