Estos seres de cuatro patas nos brindan días llenos de alegría y compañía, puede ser que también tengamos aquellos momentos donde las penitencias y retos sean más recurrentes, pero en la mayoría de los casos, son los menos.
Los animales de compañía ya sean perros, gatos, tortugas, conejos o cualquier especie que se pueda considerar mascota y sea apropiado que habite en nuestros hogares, son miembros de la familia que lamentablemente, no son eternos.
La perdida de un animal es un trago amargo que muchos hemos vivido y en ocasiones es poco comprendido por los demás. Cada persona vive su duelo de una manera distinta, lo que si se ha podido identificar es que la mayoría pasamos por cuatro etapas: la negación, la culpa, el enojo y la tristeza. A continuación detallamos cada una de ellas:
Negación: al principio es difícil aceptar la realidad y solemos negarlo. En nuestra cabeza no cabe la idea de que nuestra mascota no esté con nosotros y que la rutina diaria haya cambiado. Muchas veces, se siente o ve como traición el pensar en tener un nuevo animal en casa.
Culpa y enojo: muchas veces nos podemos sentir responsables de lo sucedido, lo cual es injustificado y esto hace que el proceso sea mas largo. Debemos de entender que no somos responsables de los hechos, los animales pueden enfermar o simplemente cumplir su meta en este plano y querer descansar. También el enojo se puede manifestar hacia las personas que nos acompañan o buscar responsabilidades en veterinarios, por ejemplo, al no poder salvar a nuestra mascota; a pesar de haber hecho todo lo que se encontraba a nuestro alcance.
Tristeza: es un sentimiento que debemos de asumir, aceptando que es un dolor natural y que pronto pasará. Después de esto, llegará la aceptación y nos quedaremos con el recuerdo de los grandes momentos con nuestro animal de compañía.
En todos los casos, lo mejor es aceptar que nuestro dolor es legítimo, pero no para siempre. Hablar de lo que nos pasa con nuestros seres queridos siempre ayuda en el proceso. Nos podemos encontrar con personas que no entiendan nuestra situación, pero sin duda, no somos los únicos que han pasado por algo así y si buscamos siempre habrá consuelo.
En el caso de que haya niños en la familia a los cuales se les debe de dar la noticia, es aconsejable buscar las palabras mas claras dentro de lo que ellos puedan entender, sin mentirles, ya que los pequeños sin importar su edad merecen saber las cosas como son. Estos pueden hacer preguntas relacionadas para lo cual los adultos necesitan estar preparados.
Las emociones cambiarán a su debido tiempo y tu mascota te acompañará en tu corazón, debemos de saber que ellos siempre estarán agradecidos por haberlos cuidado y querido, seguro dejaron un gran aprendizaje en todos nosotros.
