Los científicos que han monitoreado durante años brotes de viruela del mono en África aseguran estar «desconcertados» por la forma en que se está propagando esa enfermedad en Europa y América del Norte, ya que en era una patología que se daba en personas con vínculos muy precisos con zonas de África Central y occidental. «Debo confesar que estoy aturdido por esto. Todos los días me despierto y hay más países infectados», señaló Oyewale Tomori, reconocido virólogo y exdirector de la Academia de Ciencias de Nigeria, que forma parte de varias juntas asesoras de la OMS.
La semana pasada, Gran Bretaña, España, Portugal, Italia, Estados Unidos, Suecia y Canadá informaron infecciones, principalmente en hombres jóvenes que no habían viajado previamente a África y ahora se reportaron casos llegados desde esos países a Argentina y México.
De acuerdo a la OMS hay alrededor de 80 casos confirmados en todo el mundo y 50 más sospechosos, mientras que Francia, Alemania, Bélgica y Australia informaron sus primeros casos este fin de semana. «Este no es el tipo de propagación que hemos visto en África Occidental, por lo que puede estar sucediendo algo nuevo en Occidente», dijo Tomori en declaraciones reproducidas por el sitio web ABC News. Nigeria informa alrededor de 3.000 casos de viruela del mono al año, dijo la OMS.
«Estos brotes generalmente ocurren en áreas rurales, cuando las personas tienen contacto cercano con ratas y ardillas infectadas», dijo Tomori quien destacó que es probable que se pasen por alto muchos casos.
Ifedayo Adetifa, jefe del Centro para el Control de Enfermedades de Nigeria, dijo que ninguno de los contactos nigerianos de los pacientes británicos ha desarrollado síntomas y que las investigaciones están en curso. El director de la OMS para Europa, Hans Kluge, describió el brote como «atípico» y dijo que la aparición de la enfermedad en tantos países del continente sugería que «la transmisión ha estado en curso durante algún tiempo».
Los científicos dijeron que si bien es posible que el primer paciente del brote haya contraído la enfermedad mientras estaba en África, lo que sucede ahora es excepcional. «Nunca habíamos visto algo como lo que está sucediendo en Europa», dijo Christian Happi, director del Centro Africano de Excelencia para la Genómica de Enfermedades Infecciosas.
«No hemos visto nada que indique que los patrones de transmisión de la viruela símica hayan cambiado en África. Entonces, si algo diferente está sucediendo en Europa, entonces Europa necesita investigar eso», advirtió.
Shabir Mahdi, profesor de vacunología en la Universidad de Witwatersrand en Johannesburgo, dijo que una investigación detallada del brote en Europa, incluida la determinación de quiénes fueron los primeros pacientes, ahora es fundamental. «Necesitamos entender realmente cómo comenzó esto y por qué el virus ahora está ganando terreno», dijo y agregó: «En África, hubo brotes de viruela símica muy controlados y poco frecuentes. Si eso está cambiando ahora, realmente necesitamos entender por qué».
Más de 250 casos confirmados y otros 120 sospechosos en 23 países.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) emitió una actualización con los últimos datos científicos que se recabaron hasta el momento sobre la viruela del mono. Según señalaron, ya se confirmaron más de 250 casos y otros 120 permanecen como sospechosos. Esta patología, que ya fue detectada en 23 países, fue calificada como de “riesgo moderado” para la salud pública, aunque desde el ente sanitario internacional advirtieron que puede elevarse si se propaga a la “población vulnerable” y se establece como “patógeno humano”.
“Desde el 13 de mayo de 2022, la viruela del simio ha sido notificada a la OMS por 23 Estados Miembros que no son endémicos para este virus, en cuatro regiones de la OMS. Las investigaciones epidemiológicas están en curso. La gran mayoría de los casos notificados hasta el momento no tienen vínculos de viaje establecidos a un área endémica y se han presentado a través de los servicios de atención primaria o de salud sexual”, comienza el documento emitido en las últimas horas. En ese sentido, señalaron que “la identificación de casos confirmados y sospechosos de viruela símica sin vínculos directos de viaje a un área endémica es atípica. La epidemiología temprana de los casos iniciales notificados a la OMS por los países muestra que los casos se han notificado principalmente entre hombres que tienen sexo con hombres (HSH)”, siendo que “un caso de viruela símica en un país no endémico se considera un brote”.
Según los números emitidos por el ente sanitario internacional, hasta el 26 de mayo, se notificaron “un total acumulado de 257 casos confirmados por laboratorio y alrededor de 120 casos sospechosos. No se han reportado muertes”. “La situación está evolucionando rápidamente y la OMS espera que se identifiquen más casos a medida que se expande la vigilancia en países no endémicos, así como en países que se sabe que son endémicos y que no han notificado casos recientemente”, agregaron. Es por este motivo que señalaron que las acciones inmediatas deben centrarse en: proporcionar información precisa a los que pueden estar en mayor riesgo de contraer la viruela del simio; detener una mayor propagación entre los grupos en riesgo; y proteger a los trabajadores sanitarios de primera línea.
“La viruela del simio suele ser autolimitada, pero es probable que haya poca inmunidad entre las personas que viven en países no endémicos, ya que el virus no se ha identificado previamente en esas poblaciones”, advirtió la OMS. Asimismo, señaló que hay dos clados del virus de la viruela del simio: el de África Occidental y el de la Cuenca del Congo (África Central). El primero se ha asociado en el pasado con una una tasa de letalidad (CFR) más baja en general de alrededor del 1% en una población generalmente más joven en el entorno africano. El segundo parece causar una enfermedad grave con mayor frecuencia, con una tasa de letalidad (CFR) informada anteriormente de hasta alrededor del 10%.
Sobre la vacunación y los tratamientos, la OMS explicó que las inmunizaciones “contra la viruela tiene protección cruzada contra la viruela del simio”. Sin embargo, la inmunidad de la vacunación contra la viruela se limitará a las personas mayores (más de 40 o 50 años), siendo que, además, “la protección puede haber disminuido con el tiempo desde la vacunación”. “Si bien se aprobaron una vacuna contra la viruela (MVA-BN) y un tratamiento específico (tecovirimat) para la viruela del simio en diferentes países, en 2019 y 2022 respectivamente, estas contramedidas aún no están ampliamente disponibles en la mayoría de los países y no en absoluto en algunos”, aclaró el ente sanitario internacional.