Luis Suárez, que jugó los últimos 26 minutos del partido que el sábado el Atlético Madrid ganó ante Rayo Vallecano por la Liga de España, llegó el domingo a Montevideo y fue, junto a Darwin Núñez, Mathias Olivera y Damián Suárez, los adelantados en la legión de 26 jugadores convocados por Diego Alonso para defender a la Selección Uruguaya en los partidos de Eliminatoria ante Perú y Chile.
Al llegar al aeropuerto de Carrasco, el salteño expresó que “Hoy tenemos la suerte de que depende de nosotros la clasificación al Mundial.
Tanto el partido de Perú como el de Chile son fundamentales. Pasamos de tener poco apoyo a agotar enseguida las entradas. Eso es bueno. La gente sigue confiando en esta selección y en los jugadores.
Estamos todos con la misma ilusión de querer llegar al Mundial”.
Suárez dijo que en lo personal está “muy bien y entusiasmado a pesar de no tener los minutos que uno quiere” en el Atlético de Madrid, donde Diego Simeone lo relegó al banco de suplentes este mes. “Llego con la ilusión de venir a la selección preparándome para estos partidos. A veces venís con muchos minutos y se quejan de que venís con muchos minutos, y cuando venís con pocos … pero con la ilusión y las mismas ganas de siempre”, expresó.
Respecto a las bajas de dos históricos como Paolo Guerrero y Jefferson Farfán, de 38 y 37 años respectivamente, dio una respuesta similar a la que suele dar cuando le preguntan por ausencias en la Celeste: “Los jugadores que están en la selección por algo están”.
“Paolo ha sido de los mejores delanteros del mundo y Farfán ha tenido un nivel muy alto en Europa. En los últimos años han bajado un poco pero no quita que no sean jugadores importantes dentro del plantel”, sostuvo, y respecto a Gianluca Lapadula, que es duda, opinó que “es un grandísimo jugador que ha tenido algunos problemas físicos en los últimos partidos pero es fundamental para el planteamiento de Gareca”.