Efectivos de la Policía de Maldonado detuvieron a un sujeto que tenía dos órdenes de requerimiento tras una persecución.
El procedimiento inició mientras los agentes de la Brigada Departamental Antidrogas de Maldonado patrullaban por la Barra de Punta del Este. En ese momento detectaron a una camioneta que circulaba por ruta 10 y que estaba señalada como utilizada por un hombre requerido por las autoridades. Las indagatorias correspondían a delitos de tráficos de estupefacientes y tráfico interno, fabricación ilegal de armas de fuego, municiones, explosivos y otros.
Los agentes siguieron el vehículo y, tras pasar el puente de la Barra hacia Maldonado, el móvil policial lo rebasó. Los efectivos se identificaron como tal y solicitaron al sujeto que se detuviera, pero este no hizo caso y siguió movilizándose. Ante esta situación los agentes decidieron emprender una persecución por varios kilómetros.
Detención y condena
En el momento en el que el automóvil giró a la derecha por la calle Líber Seregni en la rotonda de Camino de los Guachos, un equipo que estaba instalado en la intersección le disparó a los neumáticos con una escopeta. Esto provocó que finalmente el vehículo se detuviera en Isla de Flores y Uruguay.
El personal de la Guardia Republicana se hizo presente en el sitio para brindar apoyo y detuvieron al sujeto, quien se movilizaba junto con otras siete personas. Ninguno de los ocupantes sufrió ningún tipo de lesión.
Finalmente, las autoridades condujeron al hombre a la Fiscalía, quien resolvió imputar al mismo. Finalmente, la jueza Letrada de 1º Instancia de Maldonado de 4º Turno condenó a C.A.F.C de 24 años de edad., poseedor de tres antecedentes penal.
En concreto, lo encontraron culpable de un delito de modalidad de negociación de estupefacientes, un delito de tráfico interno de arma de fuego, otro de porte de arma de fuego en lugares públicos, uno de disparo de arma de juego, otro de porte de arma de fuego reincidente, uno de hurto especialmente agravado y un delito de receptación, todos en régimen de reiteración real. La pena que deberá cumplir corresponde a cinco años de prisión efectiva.