Un año después del inicio del conflicto armado entre Israel y Hamás (tras el ataque de la milicia palestina el 7 de octubre de 2023), se ha cobrado hasta el momento más de 42.000 vidas en la Franja de Gaza y amenaza con convertirse en una contienda regional. El conflicto bélico se ha extendido al punto de alcanzar nuevos lugares y se puede decir que tiene varios frentes abiertos.
En la actualidad en el Líbano, Israel y Hezbollah combaten cuerpo a cuerpo tras la invasión terrestre por parte del ejército hebreo. El posterior ataque de Irán a Israel con 200 misiles abrió una nueva fase en las bases militares de Oriente Próximo. Además, Hezbollah atacó a la ciudad de Haifa, en el norte de Israel, por lo que parece ser la primera vez en su conflicto en curso con Israel.
A consecuencia de esto, Beirut ha sido testigo de días de intensos y letales bombardeos por parte de Israel, lo que ha agravado aún más la crisis humanitaria en el Líbano. Pero no todo termina ahí, ya que aparecieron nuevas amenazas en el ambiente: la represalia contra Irán por su ataque con misiles de la semana pasada será «mortal, precisa y sorprendente», dijo el ministro de defensa israelí Yoav Gallant, en un comunicado publicado en las redes sociales, y agregó: «Aquellos que intenten dañar al Estado de Israel pagarán un precio».
Mientras tanto, en la golpeada Franja de Gaza, el Ejército de Israel dice que ha rodeado Jabaliya en el norte de la ciudad y lanzó una nueva operación terrestre después de ver señales de reconstrucción de Hamas allí. En otro lugar, los ataques aéreos israelíes apuntaron a una escuela y una mezquita que se usaban como refugios en el centro de Gaza, donde afirmó que Hamas estaba operando, matando al menos a 25 personas e interrumpiendo las actividades en un hospital cercano.
Esta embestida generó que se suspenda la entrega de ayuda humanitaria y el hambre se continúe extendiendo, asimismo, en Líbano, las órdenes de evacuación abarcan la cuarta parte de su territorio. La Naciones Unidas afirmó que “Medio Oriente se está convirtiendo en un infierno y la violencia del ojo por ojo debe terminar”, haciendo referencia a los intensos bombardeos y ataques terrestres que las fuerzas bélicas llevan a cabo en zonas que ya se encuentran devastadas.