El cáncer de pulmón es un cáncer que se forma en los tejidos del pulmón, generalmente en las células que recubren los conductos de aire. Hay dos tipos principales, cáncer de pulmón de células pequeñas y cáncer de pulmón de células no pequeñas. El cáncer de pulmón representa una de las principales causas de mortalidad por cáncer a nivel mundial. Cada año se diagnostican 2.2 millones de nuevos casos, cuyo pronóstico depende de cuán temprano se detecte y otras características clínicas y moleculares.
En Uruguay representa un problema para la salud pública, con tasas de incidencia y mortalidad entre las más altas del mundo. Se calcula que aproximadamente 1550 uruguayos mueren cada año por cáncer de pulmón. Por lo que, en promedio, se diagnostican cuatro casos de cáncer de pulmón por día en el país.
Los avances en genética del cáncer y el desarrollo de la medicina de precisión han repercutido positivamente en el diagnóstico y tratamientos de los diferentes tipos de cáncer de pulmón. Uno de los aspectos más llamativos de la evolución en el diagnóstico del cáncer de pulmón es la transición de la clasificación según las características de las células y tejidos afectados a una aproximación más precisa basada en la biología molecular del tumor. Otro aspecto positivo es que la implementación de pruebas de biomarcadores en cáncer de pulmón ha aumentado y es una realidad en la práctica clínica. Por ejemplo, un reciente análisis del Grupo Español de Cáncer de Pulmón indica que, en el país europeo, el 81,2% de los pacientes con cáncer de pulmón en estadios avanzados accede a biomarcadores. No obstante, todavía persisten barreras como el coste económico y la disponibilidad de las pruebas en muchos países.
Este año los resultados de diferentes ensayos clínicos han propiciado que en 2024 se aprueben o amplíen las especificaciones de diferentes fármacos dirigidos a alteraciones genéticas concretas. En cáncer de pulmón de células no pequeñas, se ha aprobado la utilización de osimertinib para pacientes con cáncer en estadio III irresecable. También se ha aprobado alectinib (Alecensa) como terapia adyuvante para cáncer de pulmón de células no pequeñas. Por otra parte, se aprobó el uso de nivolumab y durvalumab en combinación con quimioterapia como tratamientos neoadyuvantes en pacientes con cáncer de pulmón de células no pequeñas resecables. Estas aprobaciones están orientadas a reducir el tamaño del tumor antes de la cirugía y proporcionar tratamiento adicional posterior.
Por último, como en otras áreas, la inteligencia artificial está transformando el diagnóstico y tratamiento del cáncer de pulmón, principalmente a través de su papel en el análisis de datos genómicos e imágenes patológicas.