Osamu Suzuki falleció a los 94 años. Fue por tres décadas el CEO de la compañía de la cual heredó su apellido y entre sus logros más importantes se cuenta la internacionalización de la compañía y su llegada a India.
Osamu técnicamente no es un heredero sanguíneo de la familia Suzuki. Nacido como Osamu Matsuda, este abogado hizo carrera como contador y prestamista en un banco, cuando conoció a Shoko Suzuki, nieta del fundador de Suzuki, Michio Suzuki. En la cultura japonesa, cuando no hay herederos directos que puedan suceder al patriarca es muy común que los yernos apropien el apellido de la esposa, lo que hizo Osamu.
Comenzó desde abajo en Suzuki, escalando en cargos desde 1958 hasta que llegó a la gerencia de la marca japonesa, cargo que ostentó entre 1978 y 2000, para después pasar a ser presidente del directorio de la marca hasta el 2021, cuando lo designaron como consejero de la compañía. Buscó nuevos mercados donde impulsar el negocio de los autos compactos (los kei car) por los que Suzuki era conocido en Japón. De hecho, así fue como llegó a India, para revolucionar el mercado automotor de ese país y cimentar las bases de lo que hoy es Maruti-Suzuki.