El ministro de Industria, Energía y Minería (MIEM), Omar Paganini, fue entrevistado por radio El Espectador y allí habló acerca de diversos temas relacionados a su cartera, principalmente lo vinculado a los combustibles, la paridad de importación y la posibilidad de que nuevamente se defina un ajuste para el mes próximo.
El secretario de Estado recordó que, como en el final de cada mes, el ministerio recibe información de la URSEA sobre los precios de paridad de importación, y que este es uno de los factores que toma en cuenta el Poder Ejecutivo para la fijación de tarifas, y que otro de los puntos importantes es la situación que atraviese Ancap, principalmente a nivel de finanzas. Explicó que la decisión se tomará entre este jueves y viernes, y que la cartera ya cuenta con la información preliminar. “Lo que indica la información preliminar que la URSEA ha calculado es que va a haber una distancia en el mismo sentido, es decir, que el precio de paridad de importación va a estar por arriba de los precios actuales de los combustibles”, dijo Paganini. El último precio pagado por Ancap fue de 114 dólares el barril.
Agregó que “habrá distancia en los precios”, y que la Unidad Reguladora sugiere un ajuste de $ 3 pesos para la nafta y de $ 10 para el gasoil. Explicó además que “esta distancia, que es para ajustar a la suba, es menos que lo fue en marzo, porque el precio del petróleo promedio, que toma la URSEA, y que cierra el día 25, es inferior al promedio del precio del mes pasado. Se mira el petróleo Brent y el West Texas, pero principalmente el Brent. En realidad, lo que toma la URSEA toma como parámetro es el precio del combustible derivado. Pero no obstante, el precio está basta por encima de lo que corresponde a los precios vigentes actuales”. Manifestó también que si bien el dólar mejoró, aún así la distancia para el dólar es para ajustar a la suba.
Con relación al momento que vive Ancap, dijo que en el 2021 se cerró bien el año por diversos elementos, entre ellos la venta de energía a Brasil, pero que en este año, “por no haber acompañado la suba del petróleo como se debería de haber acompañado, en 2022 Ancap tuvo que destinar recursos de su caja para ir subsidiando este nuevo aumento. Ahora es lo que estamos revisando, a ver que se puede hacer este mes”.
Consultado acerca de como visualizar de cara al futuro una posible estabilización de los precios de los combustibles, y teniendo en consideración la actual guerra entre Rusia y Ucrania, contestó que antes de la pandemia, el barril de petróleo estaba entre US$ 40 y US$ 50, y que luego en 2022, con la aceleración de las tensiones entre Ucrania y Rusia, hasta que comenzó la guerra y se alcanzaron los picos de volatilidad, que tuvieron el barril Brent a un precio de US$ 136. “Esa volatilidad tiene que ver con muchas cosas”, afirmó. Agregó que “no está en juego para nada” el abastecimiento de combustible en Uruguay, y en el caso del gas natural tampoco, “pero Uruguay siempre requiere tratativas especiales. Como Uruguay consume poco gas natural, no mueve la aguja de los mercados regionales”.