Las enfermedades tropicales desatendidas (ETD) son un grupo de enfermedades que se extienden en las regiones más pobres del mundo. Son causadas por virus, bacterias, parásitos, hongos y toxinas. Las enfermedades tropicales son las que afectan principalmente a las regiones tropicales y subtropicales del planeta, que tienen un clima cálido y húmedo.
En muchos casos, los mosquitos son los portadores del virus o bacteria que transmite la enfermedad, por lo que una simple mosquitera puede prevenir el contagio. El clima húmedo y cálido de los países tropicales favorece el contagio de enfermedades como el dengue, fiebre amarilla, malaria, cólera, leishmaniasis, filariasis linfática, enfermedad de Chagas, tripanosomiasis africana, esquistosomiasis y oncocercosis. Además, la crisis climática también alimenta la expansión de las enfermedades tropicales.
En el año 2024, el Ministerio de Salud Pública reportó casos autóctonos de dengue en Montevideo y en la zona rural de la capital; se registraron 702 casos locales de dengue en todo el país, siendo el departamento de Salto el epicentro del brote. Siendo las estaciones de verano y otoño las más problemáticas. En total, fueron 1.112 casos confirmados (autóctonos e importados), además de 5 muertes.
Debido a que estas enfermedades se generan a través de la existencia de vectores como insectos, mosquitos y moscas, animales portadores de dolencias que transportan bacterias, parásitos o virus perjudiciales para la salud de los humanos; dentro de las recomendaciones para prevenir y evitar ser víctima de estas infecciones está la higiene personal y de tus alrededores como primera medida.
Para prevenir el dengue, se exhorta a cambiar con frecuencia el agua de jarrones, floreros, peceras y bebederos de mascotas; despejar las canales para que fluya el agua lluvia; impedir que los recipientes en uso acumulen agua; hacer agujeros de drenaje a las macetas y colocarles arena y/o piedra y mantener tapados los tanques de agua de las viviendas.