Los militares rusos «han regresado del territorio controlado por el régimen de Kiev, donde estaban en cautividad y en peligro mortal», ha destacado el Ministerio de Defensa ruso en un comunicado recogido por la agencia de noticias rusa Interfax.
Los soldados serán trasladados a instalaciones sanitarias del Ministerio de Defensa «para recibir tratamiento y rehabilitación», ha añadido Moscú. «Todos los liberados tendrán la asistencia médica y psicológica necesaria», ha resaltado.
Kiev, por su parte ha informado del regreso de 93 soldados rasos, sargentos y dos oficiales en este intercambio de prisioneros. «En la lista hay militares de las Fuerzas Armadas, de la Guardia Nacoinal y guardias de frontera», ha relatado un portavoz de la Presidencia ucraniana, Andri Yermak, en un comunicado publicado en Telegram.
Los militares liberados fueron capturados en Mariúpol, Chernóbil, la isla de las Serpientes, Bajmut y Azovstal. Algunos de ellos habían llegado al complejo fabril de Azovstal en helicóptero para apoyar a las fuerzas ucranianas que resistían en el lugar cuando ya estaba cercado por los rusos.
Las autoridades ucranianas han destacado que muchos de los militares liberados tienen lesiones, algunas de ellas graves, provocadas durante el tiempo que estuvieron en cautividad y que algunos estuvieron en poder del grupo de mercenarios Wagner y de unidades chechenas.
Uno de los prisioneros liberados ha perdido 30 kilos de peso y otros están enfermos. «Podrán reunirse con sus familiares cuando terminen la necesaria rehabilitación», han matizado las autoridades ucranianas.
Hasta ahora han sido liberados casi 2.500 militares ucranianos capturados por las fuerzas rusas, pero se desconoce la cifra total de prisioneros de guerra.
