El presidente de la ANEP, Robert Silva, inauguró este jueves 6 en Durazno el edificio de la escuela N° 65, de tiempo completo, construido a través de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP) mediante la modalidad de participación público-privada (PPP). Además, encabezó un Encuentro Cara a Cara con la Comunidad, para dialogar con la ciudadanía acerca de los principales ejes que integran la transformación educativa.
La escuela José Batlle y Ordoñez, ubicada en la ciudad de Durazno hace 85 años, fue concebida en sus inicios como centro al aire libre. Luego ocupó una antigua construcción y en la actualidad asisten a ella unos 200 alumnos. Allí funcionan los niveles de educación preescolar y primaria completa, y trabaja un grupo de profesionales integrado por maestras para todos los grados, profesores de diversas disciplinas y auxiliares.
Silva estuvo acompañado por el intendente de Durazno, Carmelo Vidalín, además de autoridades educativas, departamentales y legisladores,
El presidente la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) consideró que inauguraciones como esta reafirman el compromiso con la educación pública como generadora de oportunidades. Además, informó que pronto se definirá el destino del antiguo edificio, que podría utilizarse como espacio artístico o museo.
Encuentro Cara a Cara con la Comunidad
En horas de la tarde, en tanto, las autoridades participaron en la sala Lavalleja de la capital departamental en una nueva edición del Encuentro Cara a Cara con la Comunidad. En esta ocasión, el jerarca encabezó una instancia de intercambio de información respecto a la transformación educativa. Silva estimó necesario reformar la educación, motivar a los jóvenes y que estos cuenten con las herramientas para insertarse en una sociedad en permanente cambio.
Con la transformación educativa se procura establecer un marco curricular por competencias, compuesto por destrezas, saberes y habilidades, para que los estudiantes “sean lo que quieran ser” y puedan concretar su proyecto de vida, explicó. En ese sentido, señaló que se trabaja con amplia participación, con disposición al diálogo y al acuerdo y convencidos de la necesidad de tomar decisiones para que la educación cambie.
Además, opinó que la educación consta de prácticas que “ya no corresponden” y deben dar paso a nuevas metodologías que apliquen lo interdisciplinar y los trabajos por proyecto, contrariamente al tradicional dictado de clase y evaluaciones periódicas.
El jerarca puntualizó que “no es posible cambiar la educación sin el compromiso de todos” y que las modificaciones planteadas traerán mayores oportunidades para los estudiantes que aquellas a las que accedieron generaciones anteriores.