En Florida, se suspendió una criolla debido a la nueva reglamentación del Instituto Nacional de Bienestar Animal (INBA), que tiene como objetivo proteger a los caballos de prácticas de maltrato, sin prohibir la actividad en sí misma.
Julio Acosta, uno de los organizadores del evento, lamentó la situación, explicando que ya tenían todo listo para el evento, con las tropillas y el personal de campo preparados, y que la suspensión fue una medida necesaria por la nueva normativa. «Tuvimos que tomar esta resolución por el hecho de esta nueva reglamentación», indicó Acosta.
A pesar de estar de acuerdo con algunos puntos de la normativa, como evitar que los caballos tengan la boca atada o garantizar que los palenques sean forrados, los organizadores manifestaron que ciertos aspectos de la reglamentación complican la realización de los eventos y señalaron la falta de información al respecto. Las multas por no cumplir con las normas pueden llegar a los 20 mil dólares.
Marcia del Campo, presidenta del INBA, explicó que antes de esta reglamentación no existían normativas oficiales para las jineteadas. La nueva reglamentación, que se elaboró tras consultas con los involucrados en la actividad, tiene como objetivo garantizar que los eventos se lleven a cabo respetando el bienestar de los animales. Del Campo enfatizó que la preocupación principal es evitar el maltrato directo a los caballos, como prácticas que buscan hacerlos «corcovear más», como atarles la boca o usar tachas, algo que está prohibido. Aseguró que aquellos que realicen las actividades de forma adecuada no deben preocuparse, ya que la normativa está diseñada para garantizar el respeto hacia los animales.
