La tuberculosis es una enfermedad infecciosa causada por el bacilo tuberculoso, una bacteria que suele afectar a los pulmones. Se transmite por el aire cuando una persona enferma tose, estornuda o escupe. Aunque se piensa que es una enfermedad antigua, esta afección sigue siendo la mayor preocupación de la salud pública mundial.
La enfermedad afecta principalmente a los pulmones y está estrechamente relacionada con la pobreza. Ya que este sector presenta más riesgo de contraerla. Lo mismo sucede con las personas privadas de libertad, que tienen un riesgo decenas de veces mayor que la población general. En la actualidad, la tuberculosis se puede prevenir y tiene cura; entre los tratamientos más efectivos se encuentra el tomar antibióticos por un periodo de 4 a 9 meses. Los medicamentos y la duración del tratamiento dependen de varios factores, como la edad, el estado de salud y la ubicación de la infección.
A pesar de este contexto, a nivel global, se estima que en 2023 10,8 millones de personas se enfermaron de tuberculosis. En Uruguay, la tasa de prevalencia de la tuberculosis es de 36 casos cada 100.000, pero en Montevideo y Rivera ese número se supera ampliamente con más de 50 casos cada 100.000. De hecho, en 2023 se registró un incremento de casos: 176 más que en el año anterior, con un total de 1.350 pacientes.
Es por eso que los organismos internacionales de la salud invitan a los gobiernos a seguir trabajando para mejorar la situación de la tuberculosis, especialmente en lo que refiere a los tiempos diagnósticos, puesto que más de la mitad de los casos se captan cuando la enfermedad ya se encuentra avanzada.