«Acogeremos con beneplácito los esfuerzos y estamos felices si el representante del trono papal puede ayudarnos en la liberación de los prisioneros en cautiverio ruso y el regreso a casa de los niños ucranianos deportados ilegalmente», ha manifestado Yermak, según informa la agencia estatal ucraniana Ukrinform.
En caso de que el propósito principal del viaje de la delegación vaticana «sea diferente», Yermak se ha apresurado ha recalcar que Ucrania «no necesita la mediación con Rusia». «Tenemos una muy mala experiencia en esto: todos los resultados de mediación con este país son cero», ha añadido.
El delegado del Papa para mediar en la guerra de Ucrania, el cardenal italiano Matteo Zuppi, ha viajado este martes a la capital rusa para una visita en la que, si bien no se ha confirmado oficialmente, tiene previsto reunirse con el patriarca Kirill y algunos exponentes del Gobierno de Vladimir Putin.
Zuppi ya viajó a comienzos de mes a Ucrania, donde mantuvo un encuentro cordial con el presidente Volodimir Zelenski y en el que estuvo sobre la mesa el intento de abrir corredores humanitarios para que los habitantes de las zonas ocupadas por los rusos pudieran escapar sin represalias, según informó ‘Avvenire’.
