Este miércoles finalmente se pudo confirmar que uno de los cadáveres hallado dentro de un predio ubicado en el barrio Gori (entre Santiago Vázquez y Paso de la Arena) corresponde al de la joven de 16 años que estaba denunciada como desaparecida desde el mediados del mes pasado, Ahielén Casavieja.
La desaparición de la menor de edad movilizó a los vecinos de la zona y a la familia de esta, que exigían a la policía que dieran con su paradero. La investigación apuntó como principal sospechoso a la persona que estaba con la joven la última vez que se le vio con vida, un taxista de 46 años.
Tras varias semanas el hermano de este hombre indicó que había un cuerpo descuartizado dentro de una cámara séptica de la casa que compartía con el sospechoso. Luego de que los policías llegaran e investigaran en el sitio hallaron otro cadáver y derivaron los restos de ambos para que se realizaran las pericias correspondientes con el fin de identificarlos.
Luego de varios días de espera a los análisis de de ADN estos, junto con los tatuajes que se encontraron en el cadáver encontrado en la cámara séptica, permitieron establecer que el cuerpo sí es el de Ahielén Casavieja. El otro cuerpo sigue sin identificarse, pero se maneja que podría ser una mujer de alrededor de 30 años también denunciada como desaparecida.
Este miércoles se formaliza la causa
El sospechoso por el caso, un policía retirado que trabajaba como taxista tras salir de la cárcel hace unos seis meses, será imputado este miércoles. Luego de que la policía lo detuviera este lunes en el centro; en los alrededores de la calle Uruguay y Tristán Narvaja; el martes se le realizó una pericia psiquiátrica.
La declaración de esta persona involucró a otras personas en los hechos. Este miércoles la Fiscalía citó a declarar, en condición de indagado, al hermano del hombre. La idea era averiguar si este sujeto tuvo algún grado de participación en los hechos.
