Las autoridades de la provincia de Dávao de Oro, ubicada en el sur de Filipinas, han elevado este sábado a 35 la cifra de fallecidos por un deslizamiento de tierra ocurrido el miércoles, y a consecuencia del que 77 personas todavía se encuentran desparecidas.
Un total de 32 de las personas rescatadas de entre los escombros presentan heridas de diferente gravedad, según ha hecho saber este sábado el jefe de Comunicaciones del Gobierno de la provincia, Edward Macapili, a la emisora local Super Radyo dzBB este sábado, el cuarto día de operaciones de rescate. Las operaciones han quedado suspendidas temporalmente para lo que queda de este sábado y volverán a comenzar el domingo, ha añadido el portavoz.
Así el Gobierno de Davao de Oro ha hecho un llamamiento a la población local a actuar con «cautela» y ha instado a «rezar» por los afectados por el deslave a medida que procede a la entrega de ayuda a más de 9.500 familias de la zona. El deslizamiento de tierra sepultó a decenas de trabajadores de una mina y a residentes en la localidad de Maco, que se encuentra en una zona montañosa.
La empresa Apex Mining cifró el miércoles en 86 el número de trabajadores que estaban en las inmediaciones y que podrían haberse visto afectados, según informaciones del diario ‘Inquirer’.