El Banco República Oriental del Uruguay (Brou) cierra otro año celebrando ganancias, pero también despide una administración que gracias a su “idea clara de hacia dónde ir” logró objetivos claros siguiendo una línea de descentralización y de apoyo a todos los sectores que en cierta medida, sostienen el país. En este marco Diario La R conversó con el vicepresidente de la institución financiera, Alejandro Lafluf.
Durante el primer semestre del 2024 alcanzaron una ganancia de 375 millones de dólares que los dejó “expectantes” a los resultados que se van a generar este año. “Por ahora no están cerrados pero seguramente los números que obtengamos vayan incluso a superar los números obtenidos el año pasado” de 600 millones de dólares, que destacó habían sido cifras récord.
Aterrizando lo que significa explicó que “las ganancias se traducen en inversiones a beneficio de toda la sociedad del país”, debido a que la institución contribuye con el 50% de sus dividendos a Rentas Generales y el 30% para proyectos de desarrollo que sean de interés del Poder Ejecutivo. Durante su quinquenio, la administración aportó entre dividendos e impuestos “casi 500 millones de dólares por año, que totalizando el período suman 2.500 millones de dólares”. Lafluf destacó que “eso tiene un impacto muy importante porque se vuelca a educación, obras, infraestructura, entre otros”.
A su vez, en marco a las “ganancias extraordinarias” expresó como relevante “que no ha sido una cuestión coyuntural” sino que “expresan el compromiso de los servicios, lo que ha sido una unidad del directorio, el liderazgo de su presidente, Salvador Ferrer y sobre todo una idea clara de hacia dónde llevar el banco”. Concluyendo así que “si al banco le va bien, al país le va bien”.
Desarrollo
Alcanzando el final del período administrativo le consultamos por el balance general de la gestión, analizando dos aspectos que se complementan: desarrollo y crecimiento. El vicepresidente reflexiona que lo primero es “entender una vez más lo que somos”, en esa línea aclaró que si bien son un banco que está para “apoyar todos los proyectos viables que los uruguayos se atrevan a soñar”, son el “banco país” y eso implica “un compromiso con el crecimiento y el desarrollo”, que está sostenido en la “firme convicción de que nada crece si no se desarrolla y nada se desarrolla si no crece”.
En lo que respecta al desarrollo informa que la base “es la igualdad y el acceso a las oportunidades”, rol que el Brou “jugó bien”. Lafluf realizó un punteo resumido de acciones y destacó la labor durante la pandemia y la sequía, con una “política de mano tendida y con medidas concretas de alto impacto, en momentos que fueron muy difíciles para el país”, como por ejemplo: mantener la cadena de pagos y expandir el crédito, tanto respecto a clientes individuales como a empresas, “a pesar de la contracción económica”.
Recordó a su vez, el recambio que vienen enfrentando del 40% de la plantilla de funcionarios y que “en cualquier empresa implica un desafío importante”, con un rango etario entre los 45 y 60 años, finalizando el proceso con un promedio de 30 a 35 años. El 2024 fue un año electoral, donde por ley no pudieron ingresar personal pero se prevé continuar después del cambio administrativo de 2025.
Continuando señaló los más de 30 cajeros que instalaron a lo largo y ancho de Uruguay, en marco de continuar por el camino de la inclusión financiera que se propuso el directorio y que no solo acerca el servicio sino que minimiza las posibilidades de falta de existencias de dinero y agiliza el pasaje, por ejemplo en fechas de cobro y además sirve, en ciertos lugares, como herramienta para atraer turistas.
Lafluf destacó también las herramientas de crédito que se diseñaron para el litoral del país para “morigerar el daño ocasionado al comercio por la diferencia de cambio con Argentina”; los programas de educación financiera; las campañas para activos y para pasivos; el trabajo en microfinanzas, “que atiende a un sector vulnerable” y que fue “fundamental en la pandemia y la sequía”; los convenios y las alianzas estratégicas con sectores de la economía como el lanero, arrocero, lechero con los apicultores, granjeros, fabricantes de maquinaria agrícola y demás, “que fueron clave para mantener puestos de trabajo” y la compra de campo para pequeños productores con una financiación de hasta el 90% y alargando los plazos de 10 a 30 años, “algo que no existía en el país y que se está convirtiendo en una revolución silenciosa dentro del sector”, que les otorgó un premio internacional como banca de desarrollo.
En cuanto al sector cultural, recordó las políticas de apoyo al carnaval y actividades culturales en los distintos departamentos del país, “otro ejemplo de descentralización en el que se trabajó”, sumado al que realiza en varios sectores la Fundación Banco República.
Crecimiento
En segunda instancia, realizó un resumen de lo que fue el crecimiento, entendiendo que “es la otra pata que le permite caminar a una economía y a una sociedad que progresa” y una parte que el banco “jamás ha descuidado y que también nos hemos encargado de potenciar”. En ese sentido explicó que “si la clave del desarrollo pasa por la educación, el acceso, la inclusión y otras actividades que hacen a la igualdad, la clave del crecimiento pasa por la inversión”.
El vicepresidente, describió que hay tres tipos de inversión: extranjera, privada y pública, siendo uno de los roles principales de esta última “crear las condiciones para que las inversiones privadas y extranjeras se puedan instalar de manera óptima en el país”. En ese sentido, resaltó que “la descentralización de la obra pública juega un papel fundamental a los efectos de favorecer un crecimiento integral” y el Brou “ha apoyado y acompañado una cantidad de iniciativas en materia de infraestructura, desde rutas, puentes y puertos, a lo largo y ancho del país”.
En lo que hace al crecimiento, el Brou, “es un promotor y un custodio del sistema productivo nacional, está ahí para cuidarlo cuando las cosas no van bien y está ahí para impulsarlo y promoverlo cuando las oportunidades se presentan” describió. Desafío, que considera “difícil de gestionar pero valioso de generar” y que durante este periodo de gobierno se “logró estar a la altura”.
Como cierre, expresó que el desafío más importante para los próximos años “es seguir haciendo crecer el negocio con la mano tendida a todos los sectores; fortaleciendo microfinanzas, dado el rol que juega en el cuidado y la promoción de esos sectores más vulnerables de la economía; fortaleciendo y dinamizando los sistemas de pago del Banco Central, que ya se definió una ruta; continuar dialogando y estar cerca de las gremiales, de los empresarios y los trabajadores; hay que seguir escuchando porque cuanto mejor se comprende la realidad mejor es la capacidad de respuesta”.“El diálogo permanente con los actores que hacen al crecimiento y al desarrollo nacional es sin duda el mejor instrumento con el que cuenta el Banco República para mejorar la gestión” expresó.
Lafluf anunció que se viene el desafío de continuar por el camino de implementación de pago por código QR en los comercios o negocios, directamente escaneando con el celular. Que va a “significar una facilidad operativa y una seguridad financiera de la población”.
Alejandro Lafluf le agradeció a Diario La R el acompañamiento que realizamos en este periodo y le envió un saludo a todos nuestros lectores, deseándoles un feliz 2025.
Otro Lafluf.