Prepandemia, pandemia y postpandemia: Continuidad y cambio educativo

La pandemia, aceleró la digitalización, pero creó una nueva configuración de enseñanza asincrónica digital.

El análisis de la dinámica de las TIC y la educación, en los tiempos actuales requiere ser mirado a partir de tres momentos distintos y articulados: la prepandemia, la pandemia y la actual postpandemia como articulación entre educación y TIC.  En la prepandemia había un lento avance a dinámicas de digitales de enseñanza con marcada diferenciación entre países y continentes, por inversión en telecomunicaciones y libertad de oferta. El avance hacia la digitalización era bajo comparativamente, aunque ya la educación a distancia crecía más que la matricula presencial, más allá de problemas de conectividad, formación docente o limitaciones legales a las ofertas digitales. La educación no presencial se dividía en dos modalidades: una educación a distancia tradicional apoyada en recursos de aprendizaje como libros, y una educación virtual asincrónica apoyada en plataformas de tipo LM (Learning Management) que era la modalidad creciente y mayoritaria. La presencia de la educación empaquetada asincrónica tipo MOOCs era limitada a la educación continua o como recurso de aprendizaje.

La pandemia, aceleró la digitalización, pero creó una nueva configuración de enseñanza asincrónica digital, apoyada y gestionada por plataformas empresariales globales, y que generó una enseñanza con menos mediaciones institucionales, sino de los algoritmos y las empresas proveedoras globales. Parte de las tareas locales se redujeron a al pago de licencias y asignar sus horas de uso. Incluso, irrumpieron ofertas gratis de Google y Microsoft para competir con Zoom y también algunas instituciones directamente entregaron licencias a cada docente de tiempo completo que coordinaba con los estudiantes a partir de una malla de horarios establecidos. La pandemia produjo el cierre de centros y el traslado de la enseñanza con traslado en el curso de producción de los presencial a lo digital, dotó de mayor libertad a las instituciones para buscar continuar sus procesos pedagógicos a través de formatos digitales sincrónicos no presenciales, y articuló más las tecnologías de información y comunicación a la enseñanza. Sin duda no fue un impacto homogéneo y tuvo sus diversas expresiones, tanto a nivel social, geográfico o de los niveles educativos y de las posibilidades de traslado en la curva de sustitución de trabajo por TIC y aceleró también procesos de automatización y el desarrollo de algoritmos. El impacto fue muy reducido en el nivel superior, al existir una modalidad alternativa no presencial de prestación y algunas bases técnicas, aunque se pasó de formatos asincrónicos a sincrónicos. La pandemia fue una reingeniería rápida en el nivel superior y de posgrado, hacia dinámicas no presenciales gracias a innovaciones en las TIC, y generalizó una nueva modalidad de educación sincrónica digital. Fue el mayor cambio en la historia de la educación con el pasaje total desde una educación sincrónica presencial a una educación sincrónica digital en red, apoyado en servicios de grandes empresas de comunicación globales con prestaciones descentralizadas, de costos accesibles para las instituciones, con un carácter global y de fácil utilización y accesibilidad. Zoom inicialmente y luego Microsoft (Teams) y Google (Google Meet) fueron las palancas fundamentales de esas transformaciones impulsaron el creciente capitalismo de plataformas expresado en una enorme expansión bursátil de dichas empresas. Este capitalismo digital de conectividad, equipamiento, software y redes fue el enorme beneficiario y aliado de los procesos de traslado a través de la tercerización educativa que impuso la pandemia. La tercera y actual fase, la postpandemia, se caracteriza por el rápido regreso a la dominancia de la educación presencial impulsada por grupos de poder, necesidad de uso de las infraestructuras, y demandas de algunos sectores de una interacción sincrónica y presencial. La realidad ha facilitado formas híbridas con un aumento de la flexibilidad de los sistemas educativos, al permitir nuevas modalidades sincrónicas y asincrónicas, entre lo presencial y lo virtual. Ello como resultado de múltiples tensiones por el abandono de los accesos virtuales y el regreso a la dominancia de los accesos presenciales como forma dominante o exclusiva. También la actual fase de la postpandemia se caracteriza por la instalación de un nuevo paradigma tecnológico de la IA con un impacto creciente en los sistemas de enseñanza a investigación.

Este paradigma está incidiendo, no tanto en la nueva educación sincrónica, sino en la gestión de lógicas asincrónicas de enseñanza (chatbots, algoritmos y gestión de recursos de aprendizaje) y en la irrupción de una nueva tipología de educación virtual. Incluso está cambiando el rol destacado de la conectividad local en los procesos de desarrollo de internet y educación virtual, con la aparición de nuevos proveedores satelitales como Starlink que conectan directamente a las redes sin pasar por las mediaciones locales. Las estructuras locales continúan perdiendo relevancia en la postpandemia, ante el avance y la mayor eficiencia de las redes globales de las TIC. Vistos los tres momentos, se aprecia como la virtualización en curso continua y cada fase contribuyó a un mayor impulso posterior de esta nueva realidad educativa

Eco. Claudio Rama

Dr. ED; Dr. DER; Post. Dr

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