A medida que la viruela del mono se e xtiende por el mundo, se intenta determinar como fue que se propagó tan rápido. Se han detectado hasta la fecha en un total de 12 países y se han confirmado más de 80 casos, además de haber más de un centenar bajo sospecha por el momento. La incubación de la enfermedad es de 6 a 16 días, aunque puede oscilar entre 5 y 21 días, por lo que se esperan más casos en las próximas horas.
La también llamada viruela símica o «monkeypox», tiene un tratamiento el cual fue desarrollado por Tecnologías SIGA (SIGA Human BioArmor) y aprobado por la FDA de EEUU en 2018 y por su similar europea (la EMMA) a comienzos de este año. Tecovirimat, es vendido bajo la marca TPOXX y es un antiviral con actividad contra los ortopoxvirus como la viruela y la viruela del mono.
El fármaco actúa bloqueando la transmisión celular del virus, previniendo así la enfermedad. Según SIGA «Tecovirimat ha sido eficaz en pruebas de laboratorio; se ha demostrado que protege a los animales de la viruela del mono y la viruela del conejo y no causa efectos secundarios graves en los seres humanos». TPOXX se vende en pastillas y ahora también se podrá aquirir inyectables. El 12 de mayo, SIGA anunció la firma de un contrato con el Departamento de Defensa de EEUU para la adquisición de hasta aproximadamente 7,5 millones de dólares en TPOXX oral, de los cuales aproximadamente $ 3,6 millones de TPOXX son para entrega este año.
Unos días después, el 19 de mayo, la FDA de EEUU aprobó la formulación intravenosa de TPOXX para el tratamiento de la viruela. «La formulación intravenosa es una opción importante para aquellos que no pueden tragar las cápsulas orales de TPOXX» destaca la empresa. O sea básicamente para aquellos que están en estado grave.
En junio 2019, SIGA firmó un acuerdo de promoción internacional con Meridian. Según el acuerdo, Meridian promoverá la venta de TPOXX oral para el tratamiento de la viruela en todos los mercados internacionales, excepto los Estados Unidos y Corea del Sur. Meridian Medical Technologies, Inc., es una empresa de Pfizer.
El simulacro de 2021
Con la llegada reciente de un brote en varios países con la denominada viruela del mono, surgió nuevamente un informe de una ONG norteamericana y de una entrevista de 2021 en la que Bill Gates conversó con Jeremy Hunt, miembro del parlamento británico y anticipó de algunos posibles ataques terroristas que involucrarían esta enfermedad infecciosa.
En esa entrevista, el fundador de Microsoft dio una posible solución para prevenir que eso ocurriera. “Los gobiernos de todo el mundo tendrían que llevar a cabo juegos de gérmenes”, dijo Gates. Además, insistió en ese momento en que, si las personas vivieran un vínculo constante con diversas bacterias, podrían desarrollar grandes barreras defensivas para combatirlas y sería más simple responder a los ataques. “¿Y si un bioterrorista llevara la viruela a diez aeropuertos? ¿sabes cómo respondería el mundo a eso?”, fueron algunas interrogantes que planteó el magnate estadounidense y que él mismo respondió. “Las epidemias causadas por bioterrorismo podrían ser mucho peores de lo que experimentamos hoy”, indicó Gates.
Después del brote de Covid, la organización no gubernamental de EE.UU, conocida como Nuclear Threat Initiative NTI se asoció con la Conferencia de Seguridad de Munich (MSC) para realizar un ejercicio de simulación destinado a reducir las amenazas biológicas.
El ejemplo que eligieron para el ejercicio fue ‘una cepa inusual del virus de la viruela del mono’. En el ejercicio, los dos grupos modelaron el brote de la cepa de viruela del mono en un país ficticio llamado ‘Brinia’ que eventualmente se propaga a nivel mundial, medido durante 18 meses. En el escenario, el brote inicial fue causado ‘por un ataque terrorista que utilizó un patógeno diseñado en un laboratorio con disposiciones inadecuadas de bioseguridad y bioprotección y una supervisión débil’. Al final del ejercicio, la pandemia ficticia resultó en más de tres mil millones de casos y 270 millones de muertes en todo el mundo.