La conmemoración del 35 aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre la República Oriental del Uruguay y la República Popular China nos invita a reflexionar sobre el camino transcurrido y, en especial, sobre todas las oportunidades que se nos plantean a futuro. En mis años al frente de la Embajada de Uruguay en Beijing he sido testigo del desarrollo de esta relación y he podido atestiguar el enorme potencial que existe para la expansión de la misma, sobre la base de la complementariedad de ambos países.
Esta complementariedad trasciende lo económico comercial -donde es obvia y fundamental- y se da en los más diversos ámbitos de la relación. Abarca -por supuesto y en primer lugar- lo comercial pero también engloba otras áreas estratégicas como la cooperación cultural, deportiva, en educación, en investigación, ciencia, tecnología e innovación, la economía verde, la economía digital, la protección del medio ambiente y la cooperación antártica, etc.
En los últimos 35 años se ha edificado esta dinámica y multidimensional Asociación Estratégica a través de las sucesivas visitas de los Jefes de Estado de Uruguay a China y de los líderes chinos a Uruguay. Cada una de ellas ha permitido elevar un peldaño más la confianza política a través de contactos entre cancillerías, amplia cooperación multilateral y fecundo diálogo parlamentario y entre partidos políticos de todo el espectro nacional. Asimismo, los intercambios comerciales y la cooperación se han desarrollado como con ningún otro Estado en estas últimas tres décadas. Esto hizo posible que desde hace ya una década -a través del trabajo de múltiples actores públicos y privados- China se haya convertido en el primer socio comercial y primer cooperante del Uruguay.
Un siglo de antecedentes:
Las investigaciones desarrolladas por la Embajada de Uruguay con colaboración de expertos en el tema han arrojado luz sobre hechos del pasado que no están siempre presentes en nuestra memoria cotidiana pero que esta celebración nos invita a evocar. Es así como la historiografía diplomática uruguaya nos recuerda que el primer enviado chino a Uruguay del que se tiene memoria fue el Embajador Fu Yunlong, quien arribó a Montevideo hace 135 años, en el año 1888, como emisario diplomático de la China imperial de la Dinastía Qing.
Posteriormente se habrían de suceder varias otras visitas e intercambios. En este contexto se debe destacar muy especialmente que en la ceremonia de toma del mando del Presidente Baltasar Brum en 1919, se contó entre con la presencia de un enviado especial de la novel República China, el Embajador Chin Lin Woo, con quien el mandatario uruguayo había ya iniciado una amistad en sus años al frente de la Cancillería.
Estos contactos llevaron a que nuestro país procediera a la apertura de su primera Legación en Beijing ese mismo año y que la misma estuviera a cargo de Vicente Carrió Sienra, primer diplomático de carrera uruguayo destinado a Pekín.
En este contexto, es importante recordar también que en el año 1955 el Gobierno uruguayo designo a un primer enviado especial a la nueva China, Mauricio Nayberg, quien visitó Beijing y mantuvo una histórica entrevista con el Primer Ministro Zhou Enlai, lo que generó la firma del primer acuerdo comercial bilateral para dar inicio a las relaciones comerciales entre nuestro país y la nueva China. Posteriormente, en 1956 agentes chinos y uruguayos trabajaron en un acuerdo para la exportación de lana uruguaya a China y para acordar un sistema de pagos para dicho comercio. Investigadores chinos destacan que esta habría sido de las primeras delegaciones diplomáticas de un país latinoamericano a la recientemente establecida República Popular China y de los primeros acuerdos suscritos con los países de la región.
Todos estos antecedentes de 135 años de esfuerzos bilaterales con China, hoy están muy presentes en nuestros festejos de los primeros y fecundos 35 años de relaciones diplomáticas con la República Popular China.
La consolidación de una Asociación Estratégica que aspira a más:
En estas tres décadas y media los temas en la agenda han crecido, los diálogos políticos siempre han sido fructíferos, la amistad entre nuestros pueblos se ha consolidado a través de intercambios de parlamentarios, estudiantes, artistas, deportistas, agentes comerciales y turistas, y la relación económico-comercial se ha expandido como ninguna otra, asentándose en el principio del beneficio mutuo.
En este camino es que seguimos avanzando firmemente siguiendo la línea marcada por los Presidentes Lacalle Pou y Xi Jinping después de su conversación telefónica en setiembre de 2020 cuando ambos acordaron trabajar para la profundización de la implementación integral de la actual Asociación Estratégica bilateral establecida en 2016, para elevarla a un nuevo nivel.
Para alcanzar ese nuevo nivel de asociación estratégica debemos continuar trabajando juntos para que la relación avance en todos sus aspectos y es por eso que este festejo nos permite proyectar acciones para concretar la visión de los Jefes de Estado.
Es así que ambos países han dado un paso muy importante en 2022 al finalizar el estudio conjunto de factibilidad para un posible tratado de libre comercio bilateral. Uruguay se encuentra preparado para iniciar las negociaciones durante este importante aniversario.
Es de esperar que en este 2023 se pueda programar un renovado intercambio de delegaciones y personas entre los dos países, retomándose los encuentros presenciales, dadas las mejores condiciones para la movilidad internacional en el contexto de la pandemia.
Seguramente veremos la llegada de nuevos estudiantes a ambos países, así como visitas mutuas de importantes autoridades con el correspondiente avance de los entendimientos y firma de nuevos acuerdos que reflejen esos consensos, el regreso del turismo mutuo y de los representantes del deporte y la cultura que, sin dudas, aportarán enormemente para el avance del conocimiento entre los pueblos.
En materia comercial, debo destacar que, de acuerdo a datos oficiales uruguayos, en 2022 China volvió a ser el principal socio comercial de Uruguay y el principal destino de nuestras exportaciones de bienes, alcanzándose un récord histórico para las mismas. Uruguay volvió a ubicarse entre los primeros proveedores de carne bovina y ovina, de soja, celulosa y de lácteos de China. Vemos también con muchísimo satisfacción la llegada de las primeras empresas uruguayas del sector del software y las tecnologías de la información en general a China y el interés que se ha despertado en otros sectores exportadores de nuestro país.
El continuo proceso de apertura y reforma de la economía china continua impulsando el crecimiento de empresas y sectores en Uruguay, así como ha colaborado con el desarrollo pujante del sector agropecuario nacional de los últimos años.
Desde la Embajada de Uruguay en China y sus Consulados en el territorio chino, oficinas todas del Ministerio de Relaciones Exteriores de Uruguay al servicio de los uruguayos, continuaremos apoyando el esfuerzo del sector productivo nacional para ingresar de la mejor forma posible al importante mercado chino, siguiendo los lineamientos estratégicos del Ministro Francisco Bustillo.
Este año se celebrará en China también el 10 aniversario del lanzamiento de la Iniciativa de la Franja y la Ruta por parte del Presidente Xi Jinping. Esta iniciativa ha crecido de forma ininterrumpida abarcando las más diversas áreas de cooperación, entre ellas el desarrollo de la infraestructura, el cuidado del medio ambiente y la promoción de la economía verde y digital, e impulsando el libre comercio entre sus miembros.
Uruguay es miembro de esta iniciativa desde el año 2018 y continua apoyando su desarrollo ya que presenta oportunidades de crecimiento y cooperación para todos sus miembros. Es importante destacar que la Asociación Estratégica sino-uruguaya se implementa siguiendo el espíritu de la Estrategia global de la Franja y la Ruta y los acuerdos alcanzados en el Foro China-CELAC.
En este importante 35 aniversario, aprovecho a reconocer los permanentes esfuerzos de la comunidad uruguaya en China y a los chinos en Uruguay por sus aportes silenciosos pero fundamentales a la causa de la amistad y el desarrollo de esta relación diplomática fundamental para nuestro país. También es importante agradecer a los actores que a partir del retorno a la democracia uruguaya en 1985 fueron los motores publico-privados para que el país diera este paso trascendental en su política exterior del siglo XX.
Muy felices 35 años y por muchas celebraciones más, donde en cada una de ellas podamos seguir contabilizando avances nuevos, beneficiosos para nuestros productores, nuestros empresarios y trabajadores, para nuestros estudiantes, científicos, artistas y deportistas, así como para la población en general.
Emb. Fernando Lugris
Embajador de Uruguay en China
Asi que un pais tan democratico como el nuestro, mantiene relaciones tan plrofundas con un pais comunista…¿ Y el embajador, tambien sera comuista, o simplemente alcahuete….? Dan asco- Por un lado el comunismo es el cuco del mundo, el que come niños, el que buca la guerra permanentemente, pero por el otro es el principal socio comercial de nuestra democracia. Para llorar.