La Liga de la Construcción del Uruguay (LCU) es una de las cuatro gremiales empresariales del rubro que participa junto al Sindicato Único Nacional de la Construcción y Anexos (SUNCA) y el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS) en la ronda de Consejos de Salarios que desde mayo lleva adelante una nueva negociación.
El papel de esta organización es el de defender a todos sus asociados y el de buscar la mejora y la viabilidad en la construcción a largo plazo para que siga siendo una industria pujante. “Para que el convenio colectivo exista tiene que firmar la Liga”, expresó su presidente en ejercicio, Manuel Ríos.
El primer paso a la hora de comenzar las nuevas discusiones en la materia fue acordar mantener vigentes los beneficios convenidos durante la última ronda de los Consejos de Salarios que se había desarrollado en julio de 2020. “Lo que se firmó y acordó fue no innovar hasta el nuevo convenio colectivo porque éste está vencido” desde el 31 de marzo, informó. La intención de esta conciliación es que tanto las empresas como los trabajadores tengan un marco legal en donde ampararse. “Lo que se firmó es que mientras esté la negociación colectiva, hasta el nuevo convenio colectivo, sigue vigente el pasado”, reafirmó Ríos.
Si bien hasta el momento las grandes diferencias que han surgido se encuentran entre el SUNCA y las gremiales empresariales -LCU, la Cámara de la Construcción del Uruguay (CCU), la Asociación de Promotores Privados de la Construcción del Uruguay (APPCU) y la Coordinadora de la Industria de la Construcción del Este (CICE)-, Ríos señaló que entre las organizaciones que nuclean a los empresarios del área existen matices producto de que el grupo de la construcción es muy vasto. “La realidad es muy grande y hay veces que hay puntos de vista y matices en alguna de las cosas, pero por lo general la concordancia de todas las gremiales empresariales es muy grande”, acotó.
En tanto, señaló que con el sindicato siempre se encuentran diferencias a las que catalogó como “lógicas” y “esperables”. “Algunos puntos son más fáciles de llegar a un punto intermedio o una visión conjunta y hay otros en los que no”, detalló. En particular, comentó que en la actualidad los puntos más álgidos son un viático que había sido acordado para los trabajadores de Maldonado, en donde hay una diferencia muy grande de puntos de vista, y la promoción del ingreso a las obras, aspecto que se vincula a que el personal ingrese a las mismas por sorteo. “Esos son los dos puntos que están más trancados. Hemos trabajado una decena de puntos más sobre los que estamos por llegar a acuerdos”, afirmó el presidente en ejercicio de LCU.
Por su parte, la Liga acaba de presentar hace un mes la segunda etapa de la revista Hábitat, publicación institucional que vuelve a emitirse luego de varios años, que pretende que sea un canal de comunicación entre los socios y la entidad a través de la información y los artículos que conformen sus diferentes ediciones. “Estábamos un poco quedados con la llegada de la gente. Ahora queremos trabajar para acercarnos al socio y a la sociedad entera y creo que para ello es fundamental tener un medio de comunicación”, argumentó.
Ríos indicó que Hábitat pretende ser un lugar en el que se expongan distintos puntos de vista. “Queremos hacerla bastante plural, que todos puedan aportar su punto de vista y que no sea solamente algo político-institucional. O sea, queremos que sea bastante más abarcativa”, dijo.
Los lectores de la revista de LCU van a encontrase no solamente con opiniones técnicas y artículos de nuevas tecnologías en los distintos subsectores de la construcción, sino que también habrá informes especiales sobre diversas temáticas vinculadas a la construcción. “Hace poco hicimos un trabajo sobre si puede hacerse el hormigón con el agua que actualmente suministra OSE y basados en algunas normativas ahí se da una conclusión que no es determinante, pero es una visión y es válida”, ejemplificó. Además, agregó que cuando se rubrique el acuerdo del Consejo de Salarios se publicará un artículo del mismo. “O sea, toda la información que nosotros recabamos en la Liga va a ir volcándose a Hábitat”, concluyó.
La clave:
“La negociación colectiva es un tema que es natural que sea complejo. No lo quiero minimizar, pero tampoco dramatizar. Trabajamos muy responsablemente tanto las gremiales empresariales como el sindicato. Cada uno tiene su punto de vista. Tratamos, con mucho respeto y con mucha madurez, como ha sido siempre en la industria, de negociarlo”
Manuel Ríos – Presidente en ejercicio de la Liga de la Construcción del Uruguay (LCU)
