El director general de Tránsito y Transporte, Alejandro Alberro, explicó en entrevista con Rutas del Cambio que “la movilidad es muy abarcativa, va desde el peatón hasta el transporte pesado”. Entonces, dentro del proceso de pasar del combustible tradicional al de energías limpias, trabajan a su vez con los consejos municipales para realizar un plan de movilidad en cada uno de ellos, teniendo en cuenta sus particularidades.
La Intendencia firmó en 2024 un contrato de donación con la Fundación Internacional y para Iberoamérica de Administración y Políticas Públicas que comprendió suministros de materiales que permitieron la implementación de un sistema de ciclovías en la ciudad de Canelones. “Es un avance significativo, porque conecta puntos importantes, generando otras maneras de movilidad y beneficio al usuario”. Un tema que la Intendencia viene atendiendo con diferentes organizaciones para continuar por esta línea.
Ante un Canelones “muy diverso” informó que “el sistema de movilidad va apuntando a la combinación”.
Entonces, en un contexto donde se busca que el ciudadano elija usar el transporte público -no solo para descomprimir el tránsito sino también para reducir la contaminación-, tomaron decisiones de rebaja de precios en combinaciones y mejoraron los tiempos de recorrido.
“Mejorar los tiempos de recorrido es una visión muy global, porque no hay que perder de vista al peatón -eso habla de la seguridad vial- y hay que tener en cuenta al usuario, sobre todo aquellos que hacen combinaciones, porque hay que brindarles infraestructura y coordinación de conexión, de nada sirve reducir un viaje 20 minutos si después la espera del segundo se alarga”, explicó.
Uno de los proyectos que hay sobre la mesa es el Tren-Tram, algo que, informó, requiere de no solo infraestructura para su circulación y la del peatón, sino también de coordinación entre todas las empresas de transporte para que tejan combinaciones de acceso manteniendo el beneficio de la reducción de tiempos. “Creo que hoy uno visualiza que hay que generar un alineamiento entre Gobierno Nacional, Montevideo y Canelones, aprovechando que están dadas las condiciones de generar esa transformación que queremos en el transporte metropolitano de pasajeros”.
Cambio energético
Alberro manifiesta estar “convencido de que el cambio en el transporte no solo va a ser infraestructura y tiempo recorrido, sino que también hay que apostar al cambio energético”. Canelones cuenta con una empresa “que por su espalda económica”, ya cuenta con seis ómnibus eléctricos. En esa misma línea el gobierno departamental inició un proceso de fideicomiso con el objetivo de comprar ocho ómnibus eléctricos más, que se distribuirán entre todas las empresas que prestan servicio en el departamento.
“La sustitución de ocho ómnibus de combustión a gas por ómnibus eléctricos genera un beneficio sobre el medio ambiente”, e informó que “solo esa cantidad genera 24 toneladas de CO2. Entonces, si con ocho vehículos estamos haciendo esa reducción, es una señal de que hay que seguir por este camino”.
Además, se encuentran trabajando con el Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe un fideicomiso para la adquisición de otros 35 ómnibus eléctricos más, de cara a un proceso paulatino para alcanzar en 2030 el 50% de la flota.
Junto a Zeballos se presentaron en un sorteo del Plan Subite del Ministerio de Industria, Energía y Minería, que promueve la incorporación de vehículos eléctricos.
“Planteamos un servicio social para la zona de Los Cerrillos. Había 24 gurises que terminaban sexto de primaria en escuelas rurales, pero ante la falta de liceo rurales se quedaban sin acceso al segundo nivel de educación y hoy ellos toman ese ómnibus que se nos cedió”. En ese contexto, destaca que “no emite ruido, tiene cargadores para los teléfonos, aire acondicionado y no emite gases, por lo tanto no solo hacemos un aporte para mejorar el medio ambiente, sino también se mejora la calidad de vida de los usuarios durante ese tiempo”.
“Una persona en Canelones destina de su vida, en promedio, tres horas por día de viaje y entendemos también que estas acciones van a mejorar la calidad de vida de los usuarios”, analiza.
Para hacer posible este proceso, UTE está instalando puntos de carga eléctrica en diferentes partes del departamento y del país. “Hoy andamos en unos 16 puntos de carga distribuidos en el departamento. Esto es algo que el tiempo nos va marcando, dadas las observaciones que tenemos, es un proceso que también hay que ir allanando junto a la potencia de carga”.
El director de Tránsito y Transporte resalta que la potencia es un punto de conversación porque mermaría la espera, sobre todo ante un aumento año a año de la adquisición de vehículos eléctricos. “No lo vas a cargar en 5 minutos como los tradicionales, pero si logramos que en 20 minutos se recupere la carga, sería beneficioso. Son esas cosas que hay que ajustar porque el mercado te lo requiere”.
El segundo uso
Cuando se hace el recambio de la flota, sobre todo el Montevideo, los ómnibus que quedan desafectados “históricamente algunos son adquiridos por empresas del interior”. Alberro analiza que ese otro punto, que se denomina el segundo uso, trae la interrogante de ¿cuál es el proyecto para el segundo uso?. “Respecto a los vehículos de combustión tradicional, algunos se adquieren por otras empresas o particulares y, los que quedan, parte de la solución es el reciclado”, explicó.
En Canelones, informó que este trabajo se realiza, a menor escala, con los birrodados y los autos incautados, que una vez finalizados los procesos normativos los propietarios no retiraron. “Nosotros tenemos un convenio con una industria metalúrgica que viene a separar el caucho, las cubiertas, los plásticos, los metales y los fluidos. El caucho va a una industria que recicla y lo utilizan en membrana asfáltica para los techos y para la creación de baldosas de goma, generando un segundo uso mediante el reciclado. Con los plásticos y las partes metálicas, si bien no son puras, van a fundición y como contrapartida el gobierno departamental recibe material, que es con lo que hacemos las señalizaciones de tránsito. Queda por ver qué hacemos con los vidrios y otros elementos”.
En cuanto a los vehículos eléctricos, entiende que habría que hacer el mismo análisis, “porque la batería de los ómnibus eléctricos también tiene una vida útil y estamos hablando que es litio, un elemento contaminante si sale de su contexto de armado”, finalizó.
Para transporte urbano, no es mas ecologico el uso de trolebuses?
Menos inversion, cero emision, y no deja residios o sub productos toxicos.