Los matrimonios podrán realizarse en cualquier punto del país, independientemente de donde viva la pareja. “El Estado está más cerca de la gente, ofreciendo opciones para hacerle la vida más fácil”, señaló el ministro de Educación y Cultura, Pablo da Silveira.
En diálogo con Comunicación Presidencial, Da Silveira informó acerca de los cambios introducidos mediante la ley de rendición de cuentas n.° 20.075, del 20 de octubre de 2022, a iniciativa del Ministerio de Educación y Cultura (MEC), vigentes desde el 1.° de enero de 2023.
La primera medida se refiere a la inscripción de los nacimientos. Hasta el pasado año, los bebés debían ser anotados en el lugar donde ocurrían, en un plazo de 10 días. Desde el primer día de 2023, también podrán inscribirse en la oficina del Registro Civil correspondiente al domicilio de la madre.
El jerarca explicó que con esta resolución se busca facilitarles la vida a las personas que viven en localidades pequeñas. Al respecto, señaló que en el interior del país los nacimientos suelen acaecer en las capitales departamentales y, muchas veces, quienes residen en pueblos más pequeños debían volver dentro de los 10 días para anotarlos. Ahora pueden hacerlo en la oficina de su localidad.
El segundo cambio está relacionado con el trámite de matrimonio civil. Hasta el año pasado, las personas debían casarse en el lugar de residencia de alguno de los contrayentes; en la actualidad, pueden hacerlo en cualquier parte del país, independientemente de donde viva la pareja.
Esta decisión amplía la libertad de las personas, consignó Da Silveira. Ahora pueden contraer matrimonio donde elijan, sin ningún tipo de restricciones. Asimismo, destacó que los enlaces abren oportunidades laborales en los sitios en que se efectúan. “Un casamiento mueve un montón de cosas: transporte, alojamiento, servicio de mozos, comida, bebida. Si ciertos lugares empiezan a convertirse en elegidos por bastante gente para casarse, significará más oportunidades de trabajo e ingresos para comunidades del país”, expresó.
Ambas medidas forman parte de un proceso más amplio de modernización y acercamiento del Registro Civil al ciudadano. A modo de ejemplo, indicó que en 2022 se unificó los servicios del interior del país en un sistema informático de alcance nacional, accesible en tiempo real.
Asimismo, se les dio la potestad a los intendentes y alcaldes para actuar en calidad de oficiales del Registro Civil. “Esto lleva a un registro más actualizado, más equitativo, que trata en pie de igualdad a todos los uruguayos, y mucho más descentralizado”, consideró.
