El cáncer es una de las principales causas de mortalidad entre niños y adolescentes en todo el mundo; cada año se diagnostica cáncer a aproximadamente 280.000 niños de entre 0 y 19 años. En América Latina y el Caribe, se estima que al menos 30.000 niñas, niños y adolescentes menores de 19 años resultan afectados por el cáncer anualmente. De ellos, cerca de 10.000 fallecen a causa de esta enfermedad.
En los países de ingresos altos, más del 80% de los niños afectados de cáncer se curan, pero en muchos países de ingresos medianos y bajos la tasa de curación es de aproximadamente el 20%. El impacto del cáncer infantil se traduce en años de vida perdidos, en mayores desigualdades y en dificultades económicas. La Organización Panamericana de la Salud (OPS) insta a mejorar la supervivencia de los niños y adolescente con cáncer, cuya tasa en América Latina y el Caribe es del 55%.
En el caso de Uruguay, la Organización mundial de la salud lo califica como un país de altos ingresos y es el único de latinoamérica en ese escalón, esto quiere decir que además de buenas estrategias para prevenir y tratar el cáncer infantil, también invierte gran parte del presupuesto de la salud en combatir esta enfermedad, sumado al aporte del sector privado.
El Registro Nacional de Cáncer (RNC) del Uruguay, es un sistema de base poblacional que abarca todo el país. Es miembro activo de la Asociación Internacional de Registros de Cáncer, creada en 1984 por el Ministerio de Salud Pública, en el marco de la Comisión Honoraria de Lucha contra el Cáncer (CHLCC). A finales de 2023 presentó un informe que habla del cáncer pediátrico, en Uruguay se dan unos 150 nuevos casos de cáncer al año, de ellos, 23 mueren. El 7,9 % de las muertes de niños y adolescentes se debe a algún cáncer pediátrico. Los casos de cáncer pediátrico representan el 0,5 % de todos los casos de cáncer y el 0,2 % de las muertes en América Latina y el Caribe.
La mortalidad por cáncer pediátrico ha disminuido un 12,5 % en las niñas y un 13,6 % en los niños. Entre los principales cánceres infantiles priorizados por la OMS, donde se encuentran la leucemia linfoblástica aguda, el linfoma de Burkitt, el linfoma de Hodgkin, el retinoblastoma, el tumor de Wilms y los gliomas de evolución lenta.
En el caso del cáncer infantil, el cociente de mortalidad e incidencia es de 15 por cada 100 niños diagnosticados y el índice estimado de supervivencia neta es superior al 80 %, mientras que en países desarrollados es del 85% y se ubica por encima del resto de Latinoamérica. El médico oncólogo Luis Alberto Castillo, mencionó en una entrevista que “la leucemia es la más frecuente en el país” afirma que “uno de cada tres niños que se enferma de cáncer, es leucemia”.
