Nacional y Peñarol se enfrentarán este domingo desde las 15.00 horas en la final del Torneo Intermedio, en un partido donde ambos tienen poco para ganar y mucho para perder.
Este torneo, que se juega desde el 2017, ha sido ganado cuatro veces por los tricolores, mientras que los aurinegros recién en esta edición lograron llegar a la final y van por su primer título.
El premio deportivo, además de lo que implica ganarle al tradicional rival, no parece seducir a nadie, ya que ser campeón del Intermedio sólo otorga un cupo para la próxima Copa Sudamericana, pero tanto Peñarol como Nacional, por sus posiciones en la Tabla Anual, terminarán clasificando a la Libertadores y eso significa que ninguno “cobrará” este premio por ser campeón de este campeonato pues al ir a la Libertadores no irán a la Sudamericana.
Por otra parte, diez días después de este clásico ambos tendrán sus partidos de ida por octavos de final de Copa Libertadores, donde se juegan muchísimo. Peñarol recibirá a The Strongest con la misión de sumar varios goles para subir luego tranquilo a la altura de La Paz. Y Nacional recibirá al Sao Paulo buscando, por un lado, un buen resultado para ir luego a la revancha en Brasil, pero más importante que clasificarse a cuartos de final en la copa está el hecho de tener que sumar 2 puntos para superar a Olimpia en el Ranking Conmebol y de esa manera quedar habilitado para poder clasificarse al Mundial de Clubes.
Queda claro entonces que tanto Aguirre como Lasarte están pensando 100% en esos partidos de copa, por lo que este clásico les molesta, les complica.
Y tanto es así que ambos clubes se pusieron de acuerdo para que no haya alargue en caso de empate y pasar directamente a una definición por penales. Esta decisión, que fue votada por los demás clubes también, implica, además de un grotesco cambio de reglamento a último momento, que los dos están preocupados por el desgaste físico que pueden sufrir sus jugadores a pocos días de los partidos de Libertadores.
La definición se disputará el domingo desde las 15:00 horas en el Estadio Centenario siendo Nacional local en términos administrativos, motivo por el que irá al vestuario y banco de suplentes que da a la tribuna Ámsterdam, y, por ende, el Carbonero se ubicará más cercano a la Colombes.
La tribuna Olímpica estará compartida (con el clásico pulmón en el medio) por los hinchas de ambos elencos. Albos se ubicarán en la Colombes, Olímpica contra Colombes y América contra Colombes. Mirasoles irán a las tribunas Ámsterdam, Olímpica contra Ámsterdam y América contra Ámsterdam.
Otro detalle que quedó confirmado este lunes es el precio de las entradas, que irá desde $360 hasta $1100. Las tribunas Ámsterdam y Colombes costarán $360 para socios y $550 para público general. La Olímpica $550 para socios y $850 para generales. Y la América $800 para socios y $1100 para generales.
El Colegio de Árbitros confirmó la designación para la final del Torneo Intermedio, prevista para el próximo domingo a las 15 horas en el Estadio Centenario. Si bien suele hacer estos anuncios entre miércoles y jueves, esta semana se adelantó y designó a Esteban Ostojich. El maragato de 42 años estará asistido por Héctor Bergaló y Sebastián Silvera desde las bandas, y Hernán Heras como cuarto. Christian Ferreyra se hará cargo del VAR, con Yimmy Álvarez y Santiago Fernández en el rol de asistentes.
Para Ostojich será el tercer clásico en su carrera y el segundo por los puntos. El primero fue el 14 de agosto de 2017, cuando Nacional se impuso 1-0 con gol de Sebastián Rodríguez a los 27’ en el marco de la Copa de Campeones Uruguayos. El único antecedente clásico oficial de Ostojich data del 12 e mayo de 2019, cuando empataron 1-1 en el Campeón del Siglo.
Coincido. Poco para ganar. Para perder: perder un clásico siemrpe es fulero y más si el triunfo aporta sólo para la estadística . Las posibels lesiones y alguan eventual suspensión, aunque es un riesgo ínfimo porque generalmente los jugadores de Peñarol y Nacional no son expulsados y aun así, las sanciones son mínimas en comparación con las que reciben los futbolistas de otros equipos. Son malos y parejos. Sería un milagro que ofrezcan un partido lindo con muchos goles y bien jugado. No se le pueden pedir peras al olmo.