A pocas horas de entrada en vigencia la veda electoral por el referéndum anulatorio de 135 artículos de la Ley de Urgente Consideración (LUC), representantes de la coalición de gobierno realizaron una última defensa pública al articulado previo a la elección a realizarse el próximo domingo.
En esta ocasión estuvieron miembros de todos los partidos de la coalición, a excepción del Partido de la Gente. Por Cabildo Abierto participó el senador Guido Manini Ríos; por el Partido Independiente estuvo el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Pablo Mieres; el expresidente y exsenador Julio Sanguinetti representó al Partido Colorado y el presidente del directorio del Partido Nacional, Pablo Iturralde, por parte de los blancos.
En un desayuno de trabajo organizado por la Asociación de Dirigentes de Marketing del Uruguay (ADM) los dirigentes realizaron sus últimos argumentos.
No es mágica, pero da herramientas
Uno por uno los representantes pasaron y se dirigieron a los presentes. El primero fue Manini, quien destacó que, si bien la ley “no es mágica”, da “herramientas necesarias para actuar con eficiencia y eficacia”.
“¿Qué es lo que ofrecen los que quieren derogar? Volver a marzo de 2020, volver a esa policía de manos atadas, tantas veces humillada, corrida a pedradas de barrios de Montevideo, insultada o escupida”, añadió.
Durante su intervención Mieres destacó la situación actual del país, el cual está “en crecimiento”, según valoró.
“La última mentira: acusarnos a nosotros del aumento de precios. Hay que no saber nada de economía o tener mucha mala fe. Mundo inflacionario, mundo en guerra, EEUU tiene la inflación más grande en los últimos 30 años, Brasil aumentó el combustible en 20% y por primera vez en muchos años el combustible es más caro allá que acá y todavía nos dicen que somos responsables de una situación planetaria”, dijo.
Rescate
Por su parte, el expresidente Sanguinetti destacó el carácter de “rescate” que tiene esta ley, de valores y del orden público, sostuvo.
“Las normas de seguridad son el rescate del orden público en el cual el Frente Amplio pagó tributo de una concepción ideológica. Su actuación en esta materia no fue un resultado de casualidad, sino una visión errada de la sociedad: la convicción de que en el delito la responsabilidad era toda de la sociedad”, agregó.
El último miembro de la coalición que participó fue Iturralde, que sostuvo que hay más cosas en juego además de los artículos en sí.
«Nos cuestionan por llevar adelante una ley de urgencia con una serie de normas con las que nos comprometimos con la ciudadanía durante todo el trámite electoral en todas las instancias. Es nuestra obligación, y no solo nuestro derecho, llevar adelante esos cambios con los que nosotros nos comprometimos», agregó.
